MÉXICO
Pablo Hermoso de Mendoza, hasta pronto
El rejoneador navarro se despidió de su segunda casa, San Miguel de Allende en México, de una forma muy originalUna vez finalizada su temporada mexicana y ya totalmente relajado, Pablo Hermoso de Mendoza decidió realizar una actividad un tanto inusual en su carrera y un tanto curiosa. Se acercó al centro del pueblo donde lleva casi veinte años pasando sus inviernos, San Miguel de Allende, y por sus preciosas calles paseó junto a su caballo ALBINO. Disfrutó de una mañana diferente y un tanto pintoresca, en la que los vecinos, tanto mexicanos, como norteamericanos, lo veían pasar, lo reconocían, algunos se extrañaban y muchos se pudieron fotografiar con su ídolo.
También él disfrutó del calor y color de una de las ciudades coloniales más bonitas de toda la República y del calor y generosidad de sus vecinos, todo ello en un horario que para el jinete no suele ser habitual pasear por San Miguel.
Así Hermoso de Mendoza se despidió por unos meses de la que es su segunda casa y a la que nada más terminar la temporada en Europa regresará junto a su hijo Guillermo para volver a realizar una nueva temporada por estas tierras a la que tanto cariño y gratitud les profesa.