Un proyecto monumental

Proyecto ideado y promovido por Gallito, que consideraba insuficiente la capacidad de la plaza de La Maestranza, tras no pocos inconvenientes, pegas y problemas, el 6 de junio de 1918 se inauguraba la Monumental de Sevilla, obra de los arquitectos Francisco Urcola Lazcanotegui y José Espiau y Muñoz, situada en la confluencia de lo que hoy en día es la avenida de Eduardo Dato con la avenida de la Buhaira.

Tenía un aforo de 23.055 espectadores, superando en 10.000 localidades al coso maestrante, lo cual permitía ofrecer unos precios cercanos a la mitad de los que costaba ver un festejo en la Real Maestranza.

El propio Joselito, Curro Posada y Diego Mazquiarán “Fortuna”, que lidiaron reses de Juan Contreras, integraron el cartel inaugural de esta plaza que a la muerte de su promotor fue cerrada por supuestos problemas estructurales y derribada finalmente en 1930.

Con sus planos se construyó años después la Monumental de Pamplona.