TAL DÍA COMO HOY... 18 DE MARZO DE 1959
Tal día como hoy Curro Romero toma la alternativa
Hoy se cumple el LXV aniversario de la alternativa de Curro Romero en la plaza de toros de Valencia. Fue la tarde del 18 de Marzo de 1959. Aquel día Gregorio Sánchez, en presencia de Jaime Ostos le cedió la muerte del toro Vito, de la ganadería de Concha y Sierra.
Vestido de caña y oro, un terno que se conserva en su peña taurina de Camas, aquella histórica tarde no pasó nada. La corrida no embistió y el toricantano no pudo tocar pelo. Además Jaime Ostos resultó herido menos grave y únicamente pudo matar un toro.
Las dos últimas novillladas que había toreado Curro en Valencia fueron el 7 de septiembre de 1958, alternando con Miguelín y Cobijano con un encierro de Fonseca. Y el 28 de septiembre, en esta ocasión dando cuenta de una novillada de Garzón junto a Luis Alfonso Garcés y Pepe Osuna. Curro cortó una oreja ese
Con motivo de esta efeméride, es recomendable la lectura de la obra “Curro Romero, la esencia”, del pacientemente desaparecido escritor sevillano Antonio Burgos.
El título parte del gran Camarón de la Isla, esencia de cantaores, quien estuvo íntimamente unido al arte de Curro, a quien definió en un cante como “la esencia de los toreros”.
Editada por Planeta, a lo largo de 407 páginas Burgos ha escrito, como si lo hiciera el protagonista del libro, la biografía, la semblanza y las opiniones de Curro Romero. Una obra al estilo del “Juan Belmonte, matador de toros” de Chaves Nogales, quien tuvo la virtud de inventarse una fórmula literaria para desvelar a Juan Belmonte: el relato en primera persona. Es, obviamente, un convencionalismo que aproxima el héroe al lector y que creó escuela.
Un torero de personalidad y arte irrepetibles y que marcó una época en el toreo. Fue capaz de salir por la Puerta del Príncipe de la Maestranza de Sevilla en cuatro ocasiones: 19 de mayo de 1966; 13 de junio de 1968; 29 de mayo de 1972 y 19 de abril de 1980. Y en Las Ventas lo hizo hasta siete veces por la Puerta Grande: 24 de mayo de 1973 (cortó dos orejas pero renunció a salir en hombros); 24 de mayo de 1965; 28 de mayo de 1967; 22 de septiembre de 1959; 4 de julio de 1963; 7 de julio de 1966 y 28 de mayo de 1966.
No es una biografía al uso ni una tauromaquia al uso. Es un libro que habla de un Curro Romero, un divinizado Faraón de Camas quien fue y será torero de Sevilla. Un personaje discreto en la calle y celoso de su vida privada. Burgos, a lo largo de más de cuarenta horas de charla con el hombre y el torero, disecciona su vida en tres partes, los tres tercios de la lidia: “Hay ahí en Camas uno que le dicen Curro”, “El tarro de las esencias” y “El Faraón”
En el texto se articulan capítulos breves, titulados independientemente, que refieren anécdotas, sucesos, pensamientos narrados por el torero y aliñados literaria y cronológicamente por el escritor. Trazan la semblanza de un hombre que aúna la grandeza del toreo y su sugestiva concepción de la tauromaquia, y una personalidad basada, como su toreo, en la quietud, la armonía, la gracia, la profundidad y la pureza. En el libro Curro habla de sus comienzos, de sus compañeros, de su tauromaquia, de la bravura, de las ciudades que le fascinaron, de sus triunfos, de sus cogidas, de sus fracasos, de su filosofía de la vida.
Un libro sobre el toreo y sobre la vida de obligada lectura para aficionados, e incluso no aficionados.