Lo de menos era el cartel

El 9 de julio de 1945, en la moderna historia de las fiestas de San Fermín, está especialmente señalado, puesto que para la corrida anunciada en esa fecha se agotaron las entradas. Era la primera vez que algo así ocurría en Pamplona.

El cartel, desde luego, prometía: Manolete, Agustín Parra “Parrita”, que había tomado la alternativa unos meses antes en una corrida también histórica en Valencia, y Carlos Arruza.

Pero Manolete se rompió una clavícula toreando en Alicante, Parrita tampoco estaba útil para torear en tal fecha y, para mayor fatalidad, el día 1 de julio Carlos Arruza resultó aparatosamente cogido en Burgos, anunciando al día siguiente que no estaría recuperado para el día 9. Ante esta situación de emergencia se optó el día 2 por suspender la venta de billetes y se elaboraron nuevas tarifas de precios. Finalmente, y con la plaza llena a pesar de que había variado totalmente la composición del cartel, hicieron el paseíllo aquel día Luis Miguel Dominguín, el torero de Tudela Julián Marín y el valenciano Jaime Marco “El Choni”. El festejo fue un éxito.