El PSOE da marcha atrás en la iniciativa de derogar la protección a la tauromaquia

En solo dos semanas, el PSOE ha cambiado de postura sobre la tauromaquia. Aunque inicialmente permitió que se debatiera la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) para retirar su protección cultural, finalmente se ha abstenido en el Congreso, bloqueando así el debate de fondo.

La decisión respondió a tensiones internas, especialmente en comunidades como Castilla-La Mancha, donde Emiliano García-Page ha defendido la tauromaquia, o en el País Vasco, con Eneko Andueza. Desde el PSOE alegaron que buscan evitar confrontaciones, apostando por “respetar” tanto a quienes apoyan como a quienes rechazan la práctica.

Sus socios de gobierno —Sumar, Unidas Podemos, ERC, Bildu, BNG— apoyaron la ILP y calificaron la tauromaquia como “tortura” y “obsoleta”. Nacionalistas como PNV y Junts reclamaron que sean las comunidades autónomas quienes decidan.

Por el contrario, PP, Vox y UPN votaron en contra, defendiendo los toros como parte de la historia y la identidad de España. Desde Vox hablaron de un “intento de chantaje” para atacar símbolos nacionales.

La plataforma ciudadana promotora de la ILP, No es mi cultura, subrayó que no se trata de una iniciativa partidista, sino de una demanda ética y democrática respaldada por más de 660.000 firmas. Argumentan que la cultura no debe justificar la violencia y que la mayoría social rechaza ya la tauromaquia.