¿Quién para la silla de los criadores de bravo en México?

La pandémia ha provocado que la cita para los ganaderos de bravo aztecas, sea el 26 de febrero y no habitualmente a finales de enero como se estilaba. También la sede está vacante, porque ha quedado descartado San Luis Potosuí, y si el coronavirus lo permite, que se ve complicadísimo, sería San Juan del Río, Querétaro o la Ciudad de México el destino.

El hecho cierto es que así sea vía zoom, la asamblea se realizará y el tema prioritario al margen de afrontar o minimizar los daños originados a causa del Covid 19, es la sucesión de Don José María Arturo Huerta al frente del organismo.

Cómo principal candidato para sustituir a Don Pepe Huerta se perfila un actual vocal del Consejo de la organización, Don Germán Mercado Lamm, Ganadero de Montecristo que goza de sólido prestigio y simpatía dentro de la unión, tiene excelentes relaciones tanto en lo público como en lo privado, conoce la fiesta mexicana y española; sin duda continuaría los proyectos que se dejan avanzados en atención a la cercanía y amistad con Huerta Ortega. El contra que tendría es que representa el ala tradicionalista del organismo y quizá los tiempos demanden mayor dinamismo, por lo que construir un consejo muy proactivo que permita consolidar cabildeos, avances y proyectos significativos sería una gran opción.

Quien parecía que hace medio año iba con todo por la silla de la ANCTL era su actual Secretario General, el ganadero Pablo Suárez Gerard, del hierro de Campo Hermoso, me parece que es un criador que puede innovar, tiene relaciones, juventud y es definitivo que apostaría por refrescar el organismo. Quizá en contra tendría la inexperiencia pero en cuatro años agarraría tranquillo, además del ya referido tradicionalismo que impera en la asociación.

Un ganadero que hace pocos meses levantó la mano para señalar que estaba interesado en presidir la ANCTL, es Don José "Pepe" Arroyo Loyo, dueño del hato de José Arroyo, quien goza de excelente ambiente en el gremio, tiene relaciones en lo público y lo privado además de experiencia en los ámbitos taurino y empresarial. Pareciera un candidato que le haría muy bien al gremio sin embargo atraviesa por problemas familiares muy considerables que al parecer lo tienen alejado del medio

Quién es un candidato siempre interesante, que atesora juventud, experiencia, relaciones, conocimiento del medio e intención de innovar es Sergio Hernández Weber de Rancho Seco, quien ha dicho públicamente que no irá a la contienda (por éste periodo), sin embargo en éstas épocas  todo puede ser.

Lo que es una realidad es que quien presida a partir del próximo año a los criadores de bravo en México, se lleva en las alforjas una papa caliente, ya que los tiempos obligan al cabildeó de altísimo nivel tanto con autoridades federales como estatales para obtener los mayores apoyos posibles que permitan afrontar de manera más desahogada la crisis originada por la pandémia, además que queda más que obligado a ser portavoz sumamente activo de la defensa de la Tauromaquia con gobernantes, políticos o poderes y por si fuera poco, será el responsable de la generación de una comunicación, imagen, publicidad, manejo de redes y mercadotecnia que permita la penetración definitiva además de aumento de popularidad del toro de lidia dentro de la sociedad en general y no solo dirigido a los Taurinos; mirar hacia la Fundación del Toro de Lidia española no sería mala idea; en México hay grandes productores, taurinos incluso, que atesoran la onza.

Lo anterior puede quedar en simple análisis periodístico sin embargo lo único latente y verdadero es que estamos a menos de 2 meses de la elección, que pareciera de las más trascendentales en la historia de la asociación, la respuesta a la tendencia que pretende el organismo quedará en poder del sufragio de sus integrantes.