"Estoy muy orgulloso de mis compañeros, tenemos un proyecto donde Valencia va a crecer"

El año 2021 asoma en el horizonte y se empiezan a escuchar distintas opciones de temporada, una de las más escuchadas es la posible celebración de la feria de Fallas, con ciertas limitaciones, pero parece que podría ir para delante. Y dentro de esos carteles puede haber o debería haber hueco para un torero de la tierra, joven y con proyección, todos esos valores los aúna Jesús Chover y además unas ganas locas de volver al coso de la calle de Xátiva.

Ojalá quepa posibilidad de volver a la cara del toro lo antes posible, uno vive por y para el toro. Estoy seguro que la empresa y la Diputación de Valencia, harán lo posible para que haya un hueco para mi y mis compañeros.

Jesús se nos ha pasado un año 2020 en blanco, año para reflexionar y madurar.

Creo que dentro de lo negativo siempre hay que mirar lo positivo a servido para crecer todo el mundo, para ser mejor persona para unir más el toreo y para remar todo hacia el mismo lugar.

¿En qué momento se encuentra Jesús Chover?

He madurado en lo personal, creo que eso es la clave en el toreo, he aprendido a ser hombre, eso es lo más importante. Creo que para ser torero primero tienes que ser muy hombre y ahora me siento así tengo mucha tauromaquia dentro, confío plenamente en que mi momento va a llegar y voy a ser un torero que va agradar y gustar.

¿Cómo término la ultima temporada del 2019 para ti?

Muy bonita junto con el maestro El Soro y el triunfo de Fallas nos sirvió para tener una despedida de novillero digna, a una carrera larga y dura donde nada fue fácil, siete cornadas pagué de novillero.

Torero joven, con proyección, de la tierra y todo corazón, ¿se necesita algo más en la tarjeta de visita para presentar credenciales para torear en Valencia?

Ya te digo que estoy seguro que se acordarán de mí, siento que Valencia quiere verme y sobre todo verme triunfar, hay que tener paciencia, mi concepto va a encajar, cuando encaje se que todo será más fácil, ellos me esperan.

¿En qué momento está el toreo en Valencia, respecto a la afición?

Son buenos aficionados y toreristas, Valencia se disfruta mucho, saben lo que ven. Valencia taurinamente es grande.

¿Y respecto a los profesionales?

Estoy muy orgulloso de mis compañeros, ahora mismo estamos unidos, tenemos un proyecto entre manos donde Valencia va a crecer en la lidia ordinaria, pronto saldrá a la luz.

¿Cómo es tu día a día en estos momentos?

Sigue igual, sin bajar la guardia, vivo por y para el toro, entrenó como si fuese a matar seis toros cada dia, el entrenar es una religión y una forma de vida.
 
¿Crees que al final tendremos una temporada más o menos normal en 2021?

Hay que pensar en positivo siempre, vamos a luchar para ello, el toreo es fuerza mayor tenemos que defender lo nuestro, enseñar lo que significa nuestra profesiónal pueblo, al ciudadano, seguro que en 2021 podremos disfrutar más.

¿Empezaremos en Fallas?

Yo soy un soñador, seguro que sí.

¿Y con Chover en los carteles?

Estoy convencido que sí, la fé mueve montañas, he conseguido ser matador de toros y de qué manera mi capacidad y sacrificio unirán todas esas energías que Dios ve y lo hará posible, estoy seguro.

Jesús en estos dias ha ocurrido un percance serio en el campo con el ganadero Gregorio de Jesús, aquí hay peligro cualquier día y en cualquier momento.

El campo es traicionero, uno no puede bajar la guardia, tienes que están con los cinco sentidos a la orden, en cualquier momento pasa una tragedia.

¿Como sucedió todo?

Todo pasó encerrando un toro con peligro, saltaba todos los alambrados y se arrancaba. Venía hermanado con otro toro, este conseguimos enchiquerarlo, Gregorio estaba montado en un tractor, al bajar se olvido del otro toro y este a traición lo cogió.

Gracias a Dios que estabas allí.

Sí, Dios te pone donde te tiene que poner, tuve que provocar al toro con una chaqueta, menos mal que el toro hizo por mí, son cosas increíbles e inexplicables. Acción y reacción, salté un muro de tres metros de altura sin ni siquiera apoyarme, luego vino lo peor, recoger a Gregorio, subirlo al coche y tener la templanza torera de tener los cinco sentidos puestos para relajar al maestro y relajarme yo, son cosas que pasan y no fue a peor, lo superamos todo, él está bien. Ahora tenemos que ir juntos a orar, es un milagro.