"Echo en falta más motivación del sector"

Los toros también cogen en época de pandemia, máxime cuando no se puede actuar ante el público y se intensifica la preparación en el campo. Román es uno de los matadores que este maldito año ha sufrido un grave percance mientras toreaba a puerta cerrada. El matador valenciano ya se recupera de la lesión del riñón y la fractura de dos costillas que el pasado 11 de noviembre le ocasionó un ejemplar de Las Monjas en la finca que su propietario tiene en el término sevillano de Constantina.

Al principio, en el Hospital de Constantina sólo se te apreció un dolor en la espalda.

Me dijeron que se trataba de una contractura muscular. Pero yo me conozco y sabía que no era eso. Volviendo hacia Madrid el dolor era tan grande que llamé al maestro José Luis Moreno para que me acompañase al hospital de Córdoba, y allí me diagnosticaron una fisura en el riñón.

La idea de los médicos era intervenirte de inmediato.

Sí, estaba todo previsto para entrar en quirófano al día siguiente de mi ingreso, pero comprobaron que el riñón se estaba recuperando y decidieron no operarme. Dentro de lo malo, estamos en una época de parón y no hacía falta intentar acortar los plazos de recuperación. El riñón necesita un mes para regenerarse totalmente, así que ya estoy prácticamente restablecido.

Eres de los pocos matadores que esta temporada han actuado antes y después del Estado de Alarma. En enero toreaste en Manizales, donde indultaste un toro, y en septiembre en Cabra, donde cortaste dos orejas. Es el 100% de puertas grandes en 2020.

Visto así sí. Pero la verdad es que ha sido un año muy duro para todos. Yo estaba muy motivado, con grandes esperanzas porque todo parecía que me venía de cara esta temporada y todo se partió de un día para otro. Fue un mazazo. Y aunque los toreros lo que queremos es actuar en las plazas, en cambio ha sido un año bueno para torear en el campo.

¿Ha sido una temporada perdida, o de algún modo ha servido para madurar? O sea, que el año que viene no tiene por qué notarse el parón que ha impuesto la situación sanitaria.

Al contrario. En general los toreros saldremos mejor a la plaza. Hemos tenido más tiempo para entrenar, más tranquilidad para asimilar y por tanto para mejorar, con lo cual, nuestra obligación es dar un paso más allá.

En cambio, los antis han aprovechado para acentuar sus ataques.

Sin duda eso le ha hecho daño al sector. Pero me da rabia que, en general, el sector taurino se muestre tan desanimado. Ahora es momento de ser optimista y de que todos trabajemos para que haya toros. Echo en falta más motivación. Si en los momentos débiles nos venimos abajo, nos comerán. Ahora es cuando hay que venirse arriba.

Llevas un año con tu nuevo apoderado, Manolo Chopera, pero con la situación reinante apenas puedes valorar su trabajo.

Sólo ha habido opción de torear las dos corridas mencionadas. Lo que puedo decir es que el inicio de temporada pintaba muy bien. No sé muy bien cómo trabaja, pero sí que puedo asegurar que es una persona que me da mucho cariño y confianza, y eso es fundamental. Yo estoy muy a gusto con Manuel. Esperemos que el año que viene haya ocasión de trabajar mucho juntos.

¿Qué te comenta Chopera de los planes para 2021?

Tiene esperanza de que se puedan dar Castellón y Valencia y de que yo esté en las dos ferias. A partir de ahí veremos cómo se desarrolla la temporada. Ahora está todo en el aire. Para que se produzca una reactivación real será fundamental que la vacuna pronto sea una realidad.