"En 2022 espero estar en Madrid y en Sevilla"

Esaú Fernández es un extraordinario matador de toros camero afincado en el bello pueblo toledano de Mocejón, y es que este torero viene pidiendo musas que lo canten al son de sus triunfos, pues cabe recordar que a pesar de las escasas oportunidades en La Maestranza es uno de los toreros más laureados de la capital hispalense. 2020 fue un año arábigo pero supo sacar tajada para reivindicarse en cada tarde televisada por Castilla la Mancha Media, en cambio, este año alcanzó el hito de sumar más de una veintena de puertas grandes consecutivas, algo que está al alcance de muy pocos, pues triunfar todos los días es cosa de figuras. Para culminar esta gran campaña decidió encerrarse en Mocejón con cuatro astados de cualquier plaza de primera o segunda y así conseguir fines benéficos para Cáritas. La tarde se saldó con un silencio, dos orejas y rabo y dos indultos, sin duda alguna Esaú está preparado para lo que venga cual denodado figura del toreo.

¿Cómo has llevado esta temporada?

Bueno, esta temporada para mí ha sido muy importante y muy bonita, gracias a Dios han rodado las cosas como las he soñado siempre. Yo creo que he dado un paso al frente y que la gente se ha podido dar cuenta del momento en el que me encuentro la verdad.

¿Qué sensaciones tuviste en la encerrona benéfica de Mocejón?

Bueno, fueron unas sensaciones muy bonitas. Es el pueblo de mi mujer dónde ambos vivimos y quieras que no te autopresionas, ya que había toros de cualquier plaza de primera. Pero las sensaciones ya te digo que fueron muy bonitas, esa plaza llena y con todo el mundo apoyándome lo pude disfrutar mucho, ni soñándolo hubiera salido así.

¿Qué piensas de los indultos que tanto han dado qué hablar?

Pues te digo una cosa, quitando el primer toro de El Freixo que no ayudó, hubo un toro de El Pilar que si no llega a estar lesionado hubiera sido de indulto también, fue un toro maravilloso al que se le dio la vuelta al ruedo y le pude cortar el rabo. Pero los toros de El Puerto de San Lorenzo y Victoriano del Río daba pena matarlos, hay días que todos los buenos se juntan en una misma corrida, al igual que hay días en los que se juntan los peores. Fue impresionante, las sensaciones fueron únicas y prueba de ello es la repercusión que está teniendo todo.

¿Existe la posibilidad de volver a Madrid y Sevilla en 2022?

Espero estar en ambas, pero eso lo decide la empresa. Después de estos últimos años tan buenos espero poder estar y demostrar lo que he demostrado en otros sitios.

¿Con qué sueñas por las noches?

Sueño muchas cosas bonitas, sueño que cuajo un toro y muchas veces casi se hace realidad, se han dado ocasiones que lo ocurrido ha superado a lo soñado. Pero las cosas hay que soñarlas para luego poder vivirlas.

¿Es duro el toreo?

Pues mira, el toreo es duro, pero a su vez lo más bonito que hay. Si a mí me dijeran si quisiera volver a empezar mi carrera para volver a vivir lo que he vivido, sin duda alguna lo haría de nuevo, yo creo que es muy gratificante sentir lo bonito de esta profesión. Además, si esto fuera fácil no sería tan bonito, las cosas tienen que ser duras para luego poder disfrutarlas.

¿Cómo fue superar la racha de más de 20 puertas grandes consecutivas?

La verdad que no paré de salir a hombros gracias a Dios, las cosas se juntan : los toros embisten, te encuentras en buen momento, la espada entra… Cuando esos momentos llegan hay que aprovecharlos.

¿Qué significa Sevilla para ti?

Sevilla es especial, es la plaza donde tomé la alternativa y donde cualquier torero sueña con torear. Yo he triunfado muchas tardes allí, y espero poder torear muchas veces más. Junto a Madrid, Pamplona y Bilbao son plazas que me quitan el sueño la verdad. Tengo un idilio bastante bueno con Sevilla, allí me quieren mucho y yo les quiero mucho, tenemos un gran amor mutuo.

¿Quién es Esaú Fernández?

Esaú Fernández es una persona alegre, entregada y muy fiel con su gente, como torero creo que tengo muchas cosas que decir, poco a poco y día a día voy subiendo peldaños, el que quiera saber más de mí me tendrá que conocer.

Texto: Aitor Vian