"Estamos sometidos a mucha presión, con el añadido del miedo al toro"

Hablar de Javier Jiménez es hablar del pundonor, la hombría y la exquisitez hecha torero, y es que este torero de Espartinas recoge un extraordinario ramillete de virtudes al alcance de muy pocos diestros, prueba de ello es su histórica tarde en Las Ventas o su colosal momento en el coso pamplonica dónde se sobrepuso de un gravísimo percance saliendo de la enfermería con un auténtico destrozo. 2020 fue un año complejo, pues no pudo efectuar ni un sólo paseíllo. 2021 ha mejorado levemente, y es que ha sumado 4 corridas en las que ha podido dejar detalles de auténtico torero como fue la tarde de Niebla con los astados de Torrehandilla o la reciente corrida de La Palmosilla en Ubrique dónde deslumbró por encima de todo. A pesar de haber tocado el cielo de la puerta grande de Madrid él tiene claro que su carrera ha de ir a más, pues sólo los que se plantean objetivos imposibles para muchos, son capaces de alcanzarlos.

¿Cómo has llevado esta temporada?

Bien, dentro de lo que cabe bastante bien. Veníamos del año pasado en el que no pude matar ninguna corrida, y este año ya he matado cuatro en las que creo que han habido momentos importantes.

¿Qué sensaciones has tenido esta temporada?

La verdad que buenas, venía de un año en el que estuve toreando mucho en el campo y las sensaciones han sido muy bonitas y prácticamente nuevas, porque llevaba casi dos años sin ponerme el traje de luces. Aunque haya toreado mucho en el campo en la plaza se tienen sensaciones diferentes. La sensación que he tenido es de volver a empezar, además ha sido la temporada en la que más cómodo me he sentido en la plaza, en Niebla y en Ubrique pude ser más yo. Quizá el número de festejos no es muy grande pero para mí personalmente ha sido muy importante volverme a encontrar de nuevo. Necesitaba volver a sentir el público y fue precioso.

¿A principio de temporada pensaste que iban a haber tantos festejos?

Sí, la verdad que yo siempre he sido muy optimista porque el año empezó muy raro y las expectativas no fueron nada buenas. Pero gracias a Dios se fue controlando el COVID-19 y creo que de mitad de temporada hacia adelante fue una temporada casi normal. Se ha reactivado mucho el sector y eso es importante. El haber acabado así la temporada te da muchas esperanzas de que el año que viene pueda ser un año normal y además me ha dado la sensación de que el público ha respondido muy bien en lo que respecta a la asistencia.

¿Existe la posibilidad de volver a Madrid y Sevilla en 2022?

Eso ya es trabajo del apoderado jeje. Obviamente yo creo que la temporada ha terminado bien y además con las cámaras de Canal Sur y bueno, yo tengo mi currículum ahí, posibilidades siempre hay pero hasta que no se vayan acercando las fechas… Yo me centro en estar preparado y esas cosas se las dejo al apoderado.

Actualmente echando la vista atrás a lo que sucedió en Pamplona, ¿qué piensas?

Son recuerdos bonitos la verdad, me hace sentirme orgulloso de todo lo que uno ha hecho y además me da esperanzas de pensar que si lo hice lo podré repetir. Fue una tarde que marcó mi carrera por todo lo que sucedió, incluso todavía se sigue recordando, estoy agradecido de haberlo podido vivir aunque tampoco le doy muchas vueltas a eso.

¿Es importante la preparación psicológica antes de cada corrida?

Sí, es esencial, exactamente igual que la preparación física o el toreo de salón, pero si la cabeza no la tienes en orden el resto no vale para nada. Igual que un deportista de élite estamos sometidos a mucha presión y la cabeza no actúa igual con presión que sin presión, encima a nosotros se nos añade el miedo al toro, por eso creo que es esencial.

¿Qué significa el nombre Espartaco para ti?

Es una familia a la que aprecio, a la que quiero y a la que le tengo mucho que agradecer, ya no sólo al maestro Juan Antonio, sino a su padre, su hermano… a toda su familia. Siempre nos han tratado como de la familia, nos han apoyado cuando han tenido que apoyarnos, han llorado con nosotros cuando hemos tenido que llorar, se han alegrado cuando se han tenido que alegrar… y bueno la verdad que una de las cosas que me voy a llevar del mundo del toro es haber conocido a una familia tan buena.

¿Es difícil ser torero en Espartinas en cuanto a responsabilidad?

Al contrario, es una tierra de toreros con grandes aficionados en la que gracias a Dios soy torero de aquí. Aunque ser torero es difícil en todos lados, es para privilegiados. Hemos tenido además problemas con el equipo de gobierno que hay aquí ahora mismo pero lo importante es la afición y la cultura taurina que hay. Aquí viven muchos toreros, ganaderos y aficionados. No es difícil ser torero aquí pero tenemos un equipo de gobierno que está en contra de esto, pero son pasajeros y ellos no se dan cuenta de ello, al final el pueblo tiene que ser consciente de que Espartinas tiene mucha fama gracias al maestro Espartaco que llevó su nombre por el mundo y a todos los toreros que lo hemos seguido llevando, y eso creo que se debería de respetar.

¿Quién es Javier Jiménez?

Una persona que está totalmente dedicada a su profesión, que ha dejado de hacer muchas cosas con gusto además por perseguir su sueño de ser figura del toreo y que en ello sigue todavía. Intento hacerlo lo mejor que sé y lo mejor que puedo, por lo menos ganas e interés no faltan.

Texto: Aitor Vian