SERGIO SERRANO

"Es muy bonito cruzar el umbral de la puerta grande viendo la satisfacción de tanta gente"

sábado, 18 de septiembre de 2021 · 10:14

Sergio Serrano es un humilde matador de toros albaceteño que viene peleando contra viento y marea desde que tomó la alternativa, y es que este brillante torero no ha gozado de oportunidades exactamente, pero cuando llegó esa oportunidad, no la dejó escapar. Y es que aquel 22 de septiembre de 2019 se reivindicó en Las Ventas, una tarde en la que era consciente de que si no pasaba nada importante su carrera se vería enormemente mermada. Quizá por eso fue una de sus mejores tardes, fue al coso venteño con la “relajación” que se puede tener dentro de lo que cabe porque sabía que no tenía nada que perder. Fue una tarde apoteósica con los toros de Saltillo y Araúz de Robles donde saludó una ovación y dio una vuelta al ruedo.

Aquel día supuso un punto de inflexión en su carrera. El COVID-19 lastró brevemente su carrera, pues tenía grandes contratos cerrados como el de Arles, pero en agosto salieron diferentes oportunidades televisadas que hicieron que su nombre no cayera en el olvido por culpa de esta dichosa pandemia. Ya en 2021 parecía que la escalada era ascendente aunque de manera muy despaciosa, pero de nuevo apareció Madrid, esa plaza que tanto da y quita a los toreros. Se reabría Las Ventas y este torero se encumbró en lo alto tras triunfar con los toros de Victorino Martín. Esta tarde se enfrente a otra cita vital, en su plaza, su “Chata” con los Victorinos de nuevo y con un cartel 100% albaceteño, que Dios reparta suerte.

 

¿En qué momento te encuentras?

Pues en un momento muy bueno, estoy empezando a tener el reconocimiento de los aficionados y estoy creciendo día a día, me queda mucho por alcanzar pero está siendo una temporada muy bonita.

¿Cómo estás llevando la temporada?

Bien, está siendo una temporada muy bonita, sí que es cierto que algunos días la espada no ha materializado los triunfos pero bueno creo que está teniendo repercusión en el aficionado y están habiendo días de mucho compromiso. Cada día me lo marco como si fuera el que hay sin que hubiera una más para dar lo mejor de mi. La verdad es que estoy muy contento por cómo está yendo la temporada, aunque siempre se puede pedir más, va a ser la temporada de matador de toros en la que más voy a torear de mi carrera.

¿Te ha cambiado mucho la vida desde aquella tarde de Madrid?

Sí, fue la tarde que marca un antes y un después con ese toro “Palmito” de Saltillo. Ese invierno sonó mucho mi nombre y al año siguiente tenía muchas cosas que se fueron al traste por la pandemia, empezaba en Arles con la de Miura, que eso para mí ya era un premio muy grande, pero bueno después de aquello se me ha abierto una ventana que espero aprovechar.

¿En esos momentos de sequía pensaste en retirarte?

Sí, es una profesión muy dura y siempre piensas en tirar la toalla. De hecho siempre he comentado que si aquel día en Madrid las cosas no salían como tenían que salir me tenía que ir, por ley de vida, porque al final las oportunidades son las que son. Si no pasaba nada en Madrid yo no podía estar otros tres años esperando otra oportunidad.

¿Cómo se mantiene la ilusión cuando no se torea?

Se mantiene con mucho espíritu de sacrificio, de constancia, de dedicación… Sabiendo que el amor al toro es tu vida y que una tanda en el campo a una becerra donde no te ve nadie te mantiene, al final tu vida diaria es lo que te hace feliz. Es así como se mantiene ese espíritu de no tirar la toalla. Pero es verdad que ahora que vivo otro momento diferente le doy aún más importancia a todos esos años que aguanté, pero teniendo festejos la motivación es el doble. Por eso le doy mucha importancia a cuando no tenía nada o una tarde en septiembre, hacía una preparación tan intensa como si tuviera veinte corridas. Al final yo creo que mantener ese espíritu de sacrificio ha sido clave.

Todos sabemos lo que pasó en Madrid, pero ¿qué pasó desde tu punto de vista?

Bueno, desde mi punto de vista fue una tarde muy bonita, jamás me podría imaginar que fuera a estar en la reapertura de Las Ventas con una corrida de Victorino Martín, que además era mi primera vez que los mataba, la verdad que fue muy bonito. Pasé mucho miedo y mucha responsabilidad, al fin y al cabo era la vuelta de los toros a la primera plaza del mundo y sabía que todo el mundo estaría pendiente de lo que ocurriera. Era un día que me había marcado como el día D y la hora H por la que toda mi vida queriendo ser torero cobraba sentido.

La verdad que fue duro porque el primer toro fue duro y vendió cara su muerte, pero luego salió “Venenoso” que fue un toro con mucha calidad, al que cuajé y disfruté. Fue un toro que me hizo soñar y volver a sentir los olés de Madrid, me hizo dar una vuelta de tuerca más, y además me sirvió para confirmar que lo que hice con “Palmito” de Saltillo no fue casualidad. Fue una pena que el toro no doblara las manos antes pero bueno creo que mi carrera va cogiendo vuelo poco a poco, Madrid sigue ahí y noto su respeto y su cariño con el que me recibe. Espero recompensarles para que algún día pase algo bonito.

¿Sentiste frustración al no verte acartelado en la Feria de Otoño?

No, no he sentido frustración, pero bueno sientes la sensación de que has cortado una oreja en Madrid y todos pensábamos que estaría en la Feria de Otoño, yo creo que estaba en las quinielas, ha sido un poco raro. Pero claro en la apertura de la temporada nadie me hubiera puesto en esas quinielas, pero bueno tampoco es una cosa que me haya vuelto loco. Sigo con mi temporada sin descentrarme, Madrid no se la llevan y a lo mejor ha sido hasta para bien, ahora pasará un invierno en el que tengo que seguir forjándome. Tengo que seguir creciendo y cuajándome con las corridas que tengo ahora, sí que es cierto que tengo 12 años de alternativa pero apenas he toreado, he matado en torno a 27 corridas de toros y eso no es nada. Me lo tomo como una oportunidad más de coger algo de tiempo para seguir manteniendo mi estatus y mi crédito en Madrid, de esa manera cuando llegue intentaré dar otra vuelta de tuerca más.

¿Qué te quita el sueño hoy en día?

El ser mejor profesional cada día y el ganarme el respeto de aficionados y profesionales. Ser un buen profesional como esos toreros que tanto he admirado, la profesión me va llegando con cuentagotas pero poco a poco me voy haciendo mi hueco. Además ya voy notando el cariño en mi tierra y el de los aficionados y profesionales, eso quiere decir que voy bien, pero no me puedo dormir.

¿Qué ha cambiado de ese Sergio Serrano que esperaba todos los años a la Feria de Albacete para torear?

Sinceramente yo creo que no ha cambiado nada, pero creo que a lo mejor ha cambiado esa sensación de estar menos contrariado con mi situación porque al final cuando los primeros años de matador no consigues torear e intentas respetarte a ti mismo como profesional y te quedas sentado en casa porque crees que tu profesionalidad tiene que ir acorde con unos mínimos estipulados que marcan los profesionales, tener esa paciencia es difícil porque te sientes contrariado cuando salen muchas furgonetas y la tuya no. Pero al final aprendes que cuando las cosas no pasan es por algo, normalmente es por ti, de hecho siempre es por ti : porque te falta algo, porque no es el momento o porque no te debe llegar. Al final esta es una profesión muy sacrificada y que tiene su complejidad, pero el que al final consigue aguantar ese tirón no te digo que le vayan a llegar 15 oportunidades, pero te llega una o media, pero si has sabido aguantar y estás preparado de verdad tienes premio.

Pero bueno en ese aspecto quizá ha cambiado esa sensación, en los últimos vivía feliz y metido en mi profesión, hay que tener cuidado con lo que sueñas porque se cumple, pero hay veces que ni poniendo uno su empeño no llegan las cosas. Al final me llegó en el último momento y es verdad que siempre ha habido algo que me ha retenido cuando he ido a tirar la toalla, también tuve otra rachita mala hasta que llegó aquella tarde de Azpeitia cuando le corté dos orejas a uno de Cuadri, aquello me dio ilusión para continuar. En esos momentos de dudas siempre me ha llegado algo de arriba diciéndome que me esperara porque no me podía ir.

¿Qué sentiste el martes en Albacete?

Albacete es una plaza de gran responsabilidad para mí y con la corrida de Victorino las sensaciones son muy diversas, siempre voy responsabilizado e ilusionado porque para mí es como si fuera un puerto de montaña. Pero gracias a Dios pude disfrutar de una tarde tremendamente bonita con mi compañero Rubén Pinar que me hizo sentirme orgulloso de estar detrás de las tablas cuando toreaba él, y sobre todo que me espoleó para cuando me tocara estar en el ruedo. Yo creo que ha sido una tarde que más allá de cómo estuviera, será una tarde que pasará a la historia de mi tierra y que se hablará de ella durante años. Las sensaciones fueron bonitas a la par que duras, la verdad es muy bonito cruzar el umbral de la puerta grande viendo la satisfacción de tanta gente.

¿Qué has sentido cuando te has enterado de los premios a los triunfadores de la feria?

Bueno, pues feliz, que reconozcan tu esfuerzo y lo que has hecho en el ruedo siempre es bonito. Nunca había ganado un premio en Albacete y me he podido llevar todos los que había, me siento realmente contento y orgulloso. Siento que he podido devolverles todo ese cariño que todos estos años han depositado en mí en aquella tarde.

¿Quién es Sergio Serrano?

No me gusta autodefinirme, al final debe definirme el aficionado. Me considero una persona normal, como hay que ser, me cuesta mucho autodefinirme. Pero yo creo que lo que tiene mérito y lo que vale es ser normal. Soy una persona familiar y muy de sus amigos, además soy una persona que lucha como todo el mundo por lo que considera sus sueños.

Texto: Aitor Vian

 

Más de
100%
Satisfacción
0%
Esperanza
0%
Bronca
0%
Tristeza
0%
Incertidumbre
0%
Indiferencia