“Disfrute mucho en mi debut y me sentí torero en Olivenza”

Javier Zulueta bordó el toreo en su debut con picadores en Olivenza, el pasado domingo 3 de marzo. Zulueta colmó todas las expectativas creadas y salió a hombros de la novillada “monstruo” del importante serial extremeño. La promesa hispalense demostró sus aires sevillanos con un concepto muy de verdad, con el sello de la gracia y la pureza que otorga la Ciudad del Guadalquivir a sus hijos toreros.

Por tanto y tras lo realizado por Javier Zulueta se antoja un aumento de su cotización al salir por la ‘Puerta Grande’ después de recetar una auténtica lección de temple y lentitud durante su relevante actuación. 

“La verdad es que tengo una resaca de felicidad muy grande, iba con la mente dispuesta a disfrutar en un día tan bonito como es el debut con picadores y la verdad que así fue”, con estas palabras comenzaba Javier Zulueta su entrevista a nuestra redacción.

El sevillano afirma que “Era un día de mucha responsabilidad, porque es una feria donde se congregan grandes profesionales y una afición muy muy exigente, a pesar de no ser una plaza de primera pero severidad se percibía como si lo fuera”

Zulueta comenta sobre el cartel “Una terna -cuatro novilleros- muy interesantes en los que existe amistad y competencia. Por eso había un extraordinario ambiente durante toda la mañana y considero que todos dimos el cien por cien. Gracias a esa entrega salió la mañana de bonita y de interesante para todos”

Por otro lado Javier analiza las embestidas de los utreros “Son totalmente distintas a la de los erales, no sólo por el volumen, sino por la forma de embestir que es mucho más despacio y más seria. Una embestida que realmente te deja sentir lo que es el toreo”.

La promesa sevillana expresa “En todo momento intenté expresar lo que llevaba dentro y disfrutar, y cuando remataba las tandas y en algunas ocasiones veía al público en pie, se me ponían los pelos de punta y te lo estoy contando ahora mismo y me vuelve a pasar la misma sensación”.

El joven novillero profundiza “Hubo un momento que parecía que estaba toreando en Sevilla, por cómo la gente se había entregado y por el silencio de expectación que se había creado. Me sentí muy torero”.

Para finalizar el hispalense señala que “Ojalá vengan muchas tardes como esta y este toque de atención sea al principio de muchos buenos que tengan que venir. Pero en el toreo hay que seguir constantemente y este triunfo ya quedó atrás. Ahora hay que continuar entrenando y ojalá me sirva para entrar en otras ferias”, terminaba Javier Zulueta.