MÁLAGA

La constancia de los tres rejoneadores

Dos orejas ha cortado Andrés Romero; Ventura una y Sergio Galán ovacionado en su lote
jueves, 15 de agosto de 2019 · 19:23

El esfuerzo mayúsculo de los tres rejoneadores fue el punto a destacar a partes iguales frente a la poca entrega de una corrida muy justa de presentación que llevaba el hierro de Luis Terrón. Tanto Sergio Galán con su habitual clasicismo, como Diego Ventura tirando de garra y poder; y Andrés Romero, con más corazón que acierto, a pesar de haber cortado una oreja a cada uno de sus oponentes, consiguieron meterse en el bolsillo a un cariñoso público. 

El festejo de rejones que tradicionalmente cerraba la feria de Málaga pasó a la fecha taurina por antonomasia, 15 de agosto. El cambio, con la intención de congregar a mayor público del habitual debido al festivo nacional, reunió en torno a una media plaza. 

Noble y con fijeza en la cabalgadura el primero de Terrón. Sergio Galán sacó de inicio a “Amuleto”, un precioso lusitano con el que dejó dos rejones de castigo. Faena de nivel a lomos de “Embroque” con el que clavó de manera acertada en los primeros compases, realizando varios quiebros y batidas, llegando a torear de costado. Sobre “Titán” realizó lo más destacado de su labor donde sobresalieron las piruetas. Dejó tres banderillas tomando las riendas de “Óleo” con el que dejó medio rejón de muerte trasero. El público de enfrió por las intenciones del caballero por descabellar. Su labor fue ovacionada tras haber escuchado un aviso. El cuarto, otro manso de libro, se reservó en la puerta de chiqueros tras el primer rejón de castigo. A base de constancia y de sacarlo a los medios, el jinete madrileño fue capaz de conectar con los tendidos gracias a una faena en la que hubo dos partes, una más clásica sobre un tordo vinoso de nombre “Ojeda” y otra donde con “Bambino” y “Capricho” tiró de garra y poder para conseguir conectar con los tendidos agradeciendo en todo momento su labor. El mal uso con el rejón de muerte lo privó de tocar pelo. Salió a saludar una gran ovación. 

El segundo de la tarde para Ventura marcó desde los inicios su mansedumbre. El animal, muy parado y poco colaborador, no dejó lucirse a Ventura en los primeros tercios. El rejoneador consiguió encelarlo con un espléndido “Nazarí” dejando momentos de riesgo debido a los arreones del animal, incluso hubo momentos en el que fue capaz de templarlo llegando a recorrer el anillo de la plaza en varias ocasiones. Con “Lío” lo mantuvo en los medios colocando dos banderillas al quiebro con riesgo. Faena de esfuerzo y entrega que fue remata con tres banderillas cortas al violín. Mató de rejón trasero y tres golpes de descabello. Saludó una ovación. Salió el quinto y Ventura lo recibió casi en la puerta de chiqueros montando a “Campina” fallando a la hora de clavar de primeras. Enloqueció al público en banderillas sobre “Bronce”, antes dejó dos garapullos sin muchas apreturas sobre el tordo “Fino”. Cambió de cabalgadura para salir con “Dolar” y colocar sin cabezada el par a dos manos que hizo levantar al público de sus asientos. El más sevillano que portugués emborronó su labor con los aceros mientras montando a “Prestigio” dejando un rejón trasero y desprendido. Tuvo que hacer uso del descabello que le privó de cortar las dos orejas  teniendo que conformarse con una. 

Con pies salió el tercero del festejo al que Andrés Romero cortó una oreja y cuya muerte brindó Paco Moreno Beltrán, banderillero malagueño que lo acompaña en su cuadrilla como auxiliar. Tras un bajo rejón de castigo sobre “Monte” el toro comenzó a marcar su punto de mansedumbre. El onubense realizó una faena clásica aunque con momentos comprometidos donde pudo lucirse a lomos de “Caimán” y “Guajiro”, teniendo serios problemas en las cercanías arriesgando en exceso con este último. Cerró su actuación con banderillas cortas matando en dos tiempos de un rejonazo defectuoso volviendo a poner en serio peligro la cabalgadura. Andrés Romero recibió al que cerraba plaza sobre un precioso alazán de nombre “Hidalgo”. Voluntariosa labora del caballero que no terminó de encontrarse frente a un noble animal. Buscó el calor del público con “Guajiro” realizando varios quiebros saliéndose de la suerte clavando de manera desigual. Volvió a sacar “Chamán” para dar por finiquitada su actuación dejando un rejón de muerte trasero y contrario. El cariño del público hizo que el presidente concediese una nueva oreja, llegando a pedir un más que excesivo segundo trofeo que el presidente no atendió. 

 

Plaza de Toros de “ La Malagueta”. Segunda de abono. Corrida de rejones. Media plaza. Se lidiaron toros de Luis Terrón, justos de presentación. Nobles aunque sin terminar de entregarse los lidiados en 1o, 5o y 6o lugar; mansos y parados los restantes. 

Sergio Galán, ovación con saludos tras aviso y gran ovación. 

Diego Ventura, ovación y oreja. 

Andrés Romero, oreja y oreja con petición de la segunda. 

Andrés Romero brindó la muerte del tercero a Paco Moreno Beltrán, banderillero malagueño que lo acompaña en su cuadrilla como auxiliar. 

 

3
1
0%
Satisfacción
0%
Esperanza
66%
Bronca
0%
Tristeza
0%
Incertidumbre
33%
Indiferencia