#HUELVA.- 1ª FERIA

Luque abre la Puerta de la Estrella y Morante satisface a la afición

Tarde de pocos premios ante una corrida de Torrestrella que no terminó de dar un juego a la altura del cartel
sábado, 31 de julio de 2021 · 18:23

Corrida insípida, sosa. Escaso juego dieron los de Torrestrella y, lo poco que ofrecieron, fue al principio. De más a menos. Una tarde, en principio, de gran juego de capote. Una ilusión. Breves pinceladas que quedaron en un boceto para el cuadro que se pudo haber pintado. Tres orejas repartidas entre Luque y un cambiado Morante, cuya nueva figura se requería y necesitaba. En la otra parte, la mala suerte en el debut de Juan Ortega en Huelva, que se marchó de manos vacías.

Pañuelo blanco desde la presidencia para que, hora marcada según el reloj de La Merced, diera comienzo la primera de las corridas de esta Feria Colombinas 2021. 

Panadero sería el primer Torrestrella en pisar el albero y la expectación en los tendidos por ver a Morante en su año se palpaba desde los aledaños del coso. Tanteado el animal, ofreció una serie de capote con la que arrancaba los primeros aplausos de la tarde. Tras pasar por el caballo y su correspondiente tercio de banderillas, la faena de muleta fue de menos a más, combinando naturales con manoletinas. El público no terminaba de entrar en la faena del diestro, que llegó a dejar muletazos de calidad. Nada que resultara extraordinario en relación a lo que los tendidos esperaban del genio de la Puebla. Estocada certera que le vale para cortar una oreja ante un abreplaza justo de fuerzas. 

Segundo de la tarde para Daniel Luque que parecía no tener mucho afán en realizar una faena de capote a la altura del cartel de la tarde. Suerte para los aficionados que, tras dudar si realizarla o no y previo a desmonterarse para dar paso al tercio de banderillas, se plantó en los medios para dibujar una serie de chicuelinas que, tras rematar con una bonita media, cambiaba las sensaciones. Muleta en mano la cosa fue distinta. Su comienzo arrancaba palmas sonoras desde los tendidos. Preciosos naturales hechos para el deleite del aficionado, quienes acompañaban con olés la faena del diestro. El final de la terna se midió en apurar las distancias con el astado, pasándose muy cerca los pitones del animal. Riesgo a un lado, era el momento de la suerte suprema, donde no falló. Oreja para el sevillano con fuerte petición para la segunda. 

El tercer Torrestrella no sería plato de buen gusto. Toro que no medía bien las distancias, sobre todo en largas. Fuera lo que fuese, motivos verían desde el palco presidencial para devolver al animal a los corrales. Con nombre Impaciente, no duró mucho en el coso. Turno, pues, para Cansadito, primer sobrero. Las hechuras del animal tras salir por la puerta de Toriles fueron aplaudidas por los aficionados. Sin embargo, la bravura en la embestida no permitió a Juan Ortega hacer un buen quite. No comenzaba bien el debut de Ortega en La Merced, aunque fueron los banderilleros con su espectacular tercio de banderillas quienes metieron al público en la faena. Con la muleta poco se pudo hacer. Juan Ortega no terminaba de ver por dónde poder hacer algo, pero su oponente no estaba por la labor. Todo lo que presentaba en hechuras se fue perdiendo en las embestidas. Ni con el acero tuvo fortuna, dos pinchazos. 

Segundo para Morante que no terminaba de ver a su rival. Así se vio sin, prácticamente, faena de capote. Los pases se sucedían sin ver nada fijo. Mucho tiempo en el caballo, demasiado para algunos. Incluso tras el tercio de banderillas, las apuestas se iniciaban desde el tendido en relación al tiempo que el diestro tardaría en tomar el estoque. Que no quedara en el intento sacar agua de pozo seco. No se dio por vencido y pintó unos naturales; empeño recompensado desde la afición. Qué distinto y qué necesario es este Morante, que aguanta toros con poco juego. Ahora sí, la tarde estaba hecha. Certero con el estoque y toro echado. Ovación para el maestro de La Puebla que satisface a la afición con su entrega. 

Distinto quinto. La nobleza fue creciendo con el paso de la terna. Daniel Luque supo leer al animal que tenía frente a él, dándole tiempo y acortando distancias, donde podían ligarse los naturales. El diestro cerró la tanda realizando sus famosas luquesinas. Nada extraordinario, dado el juego del astado. No muy acertado con la espada, tuvo que tirar de descabello para cortar su segunda oreja de la tarde, abriendo así la puerta grande. 

Para el cierraplaza las esperanzas eran prácticamente nulas. Salió alegre de los toriles y, si la tarde hubiese estado caliente, otro gallo cantaría. Pero el panorama era el que era y, salvando dos o tres verónicas, nada a resaltar. Brindis al público, en un intento de conexión con el mismo, pero su adversario no quería ser participe de una terna destinada al olvido. No colaboraba en embestidas, duras para el diestro que no sabía como templar la situación. Costaba encontrar el punto medio en cuanto a la colocación de la muleta. A pesar de ello, intento sacar agua de pozo seco. Predisposición que el estoque emborronó la faena del sevillano. Ovación para Juan Ortega para cerrar una tarde sosa, de más a menos, con un ganado de escaso juego.

 

Plaza de toros de Huelva. Primera de Feria de Las Colombinas.- Toros de Torrestrella para Morante de la Puebla, Daniel Luque y Juan Ortega.

Ficha del festejo:

Morante de la Puebla, oreja y ovación

Daniel Luque, oreja y oreja

Juan Ortega, silencio y ovación

 

Fotos: Arjona

 

 

 

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