Cuando toro y torero son bravos

Tarde de compromiso. De lógicos nervios. Nek Romero debutaba con picadores ante sus paisanos. Cabía la duda de cómo podía afectarle una cita tan significativa. Pero la incertidumbre quedó despejada desde el principio. La tranquilidad, la frescura de mente y el acierto en las decisiones fue una constante a lo largo de todo el festejo. Su actuación frente al último fue una locura vivida con intensidad sobre el albero y en los tendidos. Era bravísimo "Pudorosón", y tan bravo como él fue el nuevo novillero.

El de Victoriano del Río tuvo fijeza, prontitud, celo, recorrido, clase… hacía el avión en cada muletazo. No era sencillo estar a su altura, pero Nek lo estuvo. No hubo ninguna duda. Le presentó las telas adelante y se lo trajo muy toreado y perfectamente ligado en series profundas de mano baja, con las zapatillas enterradas en la arena, sin la mínima rectificación. Se ciñó las embestidas con sorprendente seguridad, aplomo y autoridad, en redondo y al natural. La plaza hervía ante una faena tan compacta y maciza. Si lo mata  hubiera conseguido los máximos trofeos, pero se encasquilló con los aceros. La oreja concedida fue pura anécdota. Para el recuerdo quedará una labor que encendió la ilusión y la expectación de todos cuantos le vieron.

Con el primero de su lote asustó al miedo. Fue éste un animal violento que enseñaba las puntas de los pitones por delante y que se le coló en varias ocasiones. En principio pareció quedarse corto por el pitón izquierdo y después se le acostó por el derecho llegando a alcanzarle el muslo varias veces. No le cambió el semblante a Nek, que tragó en un quehacer de valor seco y entrega absoluta y sincera. Le recetó una estocada volcándose de verdad y la emoción dio paso a la concesión de dos apéndices.

No le acompañó a hombros Manuel Caballero porque se demoró con el estoque con el que salió en tercer lugar, un astado soso al que llevó con suavidad y mimo, dándole tiempo entre tanda y tanda porque le costaba seguir la franela. Faltó ritmo para que se produjera mayor conexión con los tendidos, pero técnicamente estuvo perfecto. Al final pisó terrenos comprometidos en la corta distancia y el público se lo valoró.

Antes había cortado una oreja de un ejemplar con las fuerzas justas que duró poco, quizá porque le exigió en dos primeras series de mano baja y trazo largo. Protestó el de Victoriano echando el freno y llegando a cogerle hasta en dos ocasiones, afortunadamente sin consecuencias. A este lo mató por arriba.

Para la última novillada picada de la “Semana Taurina” de Algemesí, Victoriano del Río envió un encierro de correcta presentación y más ofensivo de pitones que en tardes anteriores. Duró poco el lote de Caballero, sacó genio el segundo y fue excepcional el cuarto, ‘Pudorosón’, que fue premiado con la vuelta al ruedo con todo merecimiento.

Algemesí, 1 de octubre de 2022. 8ª de feria. Lleno. Novillos de Victoriano del Río correctos de presentación, duró poco el 1º, sacó genio el 2º, soso el 3º y bravo el 4º, premiado con la vuelta al ruedo.

Ficha del festejo:

Manuel Caballero, oreja y vuelta al ruedo

Nek Romero, dos orejas y oreja tras aviso