#HUELVA.- 3ª FERIA

Pleno también en la de rejones, Ventura, Andrés Romero y Francisco Velásquez a hombros

Paco Velásquez corta una oreja a cada uno de sus toros, Diego desoreja a su segundo y Andrés Romero cortó tres, dos de ellas a un sobrero que regaló
domingo, 31 de julio de 2022 · 18:08

Tercera tarde de la feria. Tradicional domingo de rejones en el coso de La Merced de gran atractivo para la afición por múltiples razones: Diego Ventura, en un momento culmen de su carrera; el regreso del hijo pródigo y la alternativa de Paco Velásquez, la segunda de la temporada tras Conquero. Y, para rematar el cartel, la ganadería de Pereda lidiaba por primera vez en su historia una corrida de rejones. El espectáculo estaba servido y nadie se lo quiso perder, ocupando gran parte de la plaza.

El primero de la tarde sería para Paco Velásquez, doctorado por Diego Ventura y con Andrés Romero de testigo. El rejoneador portugués dio una clase de temple con el abreplaza tanto al recibirlo con Vasquiño como en banderillas con Volapié. El primero de Pereda colaboró mucho en la faena de Velásquez, toreándolo éste de frente e, incluso, dando pinceladas de costado. En cuanto a la ejecución, las banderillas las colocó algo caídas, sobresaliendo el par a dos manos que clavó, prácticamente, en el costado del animal. Pinchazo y rejón de muerte para cortar la primera oreja de la tarde abriendo el apetito de los tendidos en la primera faena.

Con el sexto y último de la tarde, Paco Velásquez tuvo que hacer frente a un toro despistado y sin querer entrar en el juego del rejoneador hasta que éste le colocó el rejón de castigo, consiguiendo más transmisión en el animal. Banderillas de nuevo con Volapié, citando de lejos y queriendo clavar con limpieza al estribo. Fue acortando distancias a lomos de Ritz, subiendo el nivel de su faena, la cual fue de menos a más, que bordó con dos banderillas. En la suerte suprema, Paco Velásquez fue el más atinado de la tarde con los aceros.

Diego Ventura salió al ruedo en medio del silencio de los tendidos que corroboraban la concentración y ganas de la afición por ver al genio a caballo que ya acumula 22 puertas grandes esta temporada. Montando a Generoso, a porta gayola y con garrocha paró a un segundo toro que salió con muchos pies, llegando a encerarlo de forma extraordinaria. Banderillas con Fabuloso, quebrando bien, clavando mejor y adornándose con piruetas en la cara de un astado noble y reservado que hacía a exigir a Diego de experiencia. Terminó de acicalar su faena a lomos de Velásquez antes de sacar a Guadiana para el último tercio, que terminó tomando el descabello para acabar con su rival. No salió muy contento el genio que prometió a la afición una segunda faena de mucha entrega ya que su oponente se fue viniendo a menos y no permitió a Ventura eso por lo que la afición acudió a la plaza. El público quería ver a ese Diego de puertas grandes, de faenas imposibles, de magia sobre la montura.

 

 

Y el cuarto se lo permitió, en cierto modo. El genio recibió al de Pereda con un rejón de castigo que puso de poder a poder para después colocar un segundo. Con Fino comenzó la faena de banderillas, citando de frente y con ceñidos quiebros, pero la apoteosis vino con, como no, Nazarí. Caballo único el de Ventura; pocos, por no decir ninguno, dominan los terrenos como él. Toreó de lado, llevando cosido al de Pereda al costado. Nazarí y Ventura forman uno de esos binomios que quedarán para la historia. Último tercio con Guadalquivir antes de la actuación de los forcados para tomar el rejón de muerte y clavar tras pinchar. Las dos orejas se pidieron al unísono en unos tendidos teñidos de blanco. Diego lo había vuelto a hacer.

Cerraba la terna Andrés Romero, de vuelta en casa y con ganas de darle todo a su tierra que le recibió con palmas por Huelva. Cómo debe sentirse eso desde el ruedo. Sacó a Golondrina y tomó el marsellés para recibir a un tercero que mostró tener menos celo que sus hermanos. Arriesgó con Meridio en banderillas y con Guajiro buscó más la cara del toro. Un rejón de muerte y descabello para un animal que se resistía a caer. Andrés le reconoció su aguante. Faena de oreja para reencontrarse con su público.

Sin embargo, con el quinto Pereda de la tarde veríamos una injusticia por culpa de los aceros. Andrés también recibió al segundo de su lote con un rejón de castigo y sacó a Fuente Rey para demostrar que quería esa puerta grande. Toro con fijeza y prontitud que Romero supo llevar cosido a la grupa tras clavar. Con Fuente Rey de lejos, con Farrugia de cerca. El de Escacena del Campo dejó un gran repertorio para el deleite de una afición que tenía clara la concesión de trofeos. Pero aún quedaba el rejón de muerte, donde Andrés se atascó y la presidencia hizo notar este efecto en su decisión de no concederle la segunda oreja pese a la unánime petición por parte de los tendidos. Menuda bronca se llevó la presidencia. Andrés dio una vuelta al ruedo para recoger la ovación de los tendidos. No podía acabar así la tarde.

No quiso ser el único en irse a pie. No ante su regreso a casa. Así que pidió el sobrero y el director de lidia se lo concedió. Y menos mal, porque vimos la mejor actuación de la tarde. Desde el recibimiento con Golondrina hasta las tres cortas con Chamán, Romero puso patas arriba la plaza. Con Fuente Rey comenzó a labrarse el triunfo arriesgando mucho al meterse entre el toro y las tablas, a cada vez más ajustada. Y con Farrugia desató la locura volviendo a citar en corto para clavar con quiebros espectaculares en la misma cara. Gran talento el que atesora este animal. Romero tiene un diamante en bruto. Culminó una faena de gran emoción con un rejón de muerte que entró al segundo intento y que, esta vez sí, la presidencia no pudo hacer oídos sordos a la petición y mostró los dos pañuelos blancos. El genio y la raza de Andrés Romero se vio ajusticiada en una plaza que sanó con la última actuación del rejoneador onubense, quien besó la tierra de su plaza esperando volver en un tarde que espera no se demore tanto.

 

Plaza de toros de Huelva .- Segundo festejo de las Colombinas 2022. Toros de José Luis Pereda para Diego Ventura, Andrés Romero y Paco Velasques

Ficha del festejo:

Diego Ventura, ovación y dos orejas

Andrés Romero, oreja con leve petición, vuelta al ruedo y dos orejas.

Paco Velasques, oreja y oreja

Fotos: Arjona

 

TORO A TORO:

Salía al ruedo Diego Ventura para doctorar al rejoneador Paco Velásquez que, tras brindar su primer toro, se puso manos a la obra. Paró muy bien al abreplaza, llevándolo a los medios con el animal cosido a la grupa. Un primer rejón de castigo puesto en lo alto y que no rompió obligó al portugués a poner un segundo, también por alto, aunque algo trasero. En banderillas calentó a los tendidos lidiando con clase, clavando al estribo y citando a un toro con transmisión y trapío al que llegó a torear de costado. Un animal muy pegado al caballo en las embestidas. Sin embargo, las banderillas las colocaba algo caídas, sobre todo el par a dos manos, que clavó prácticamente en el costado del toro. Fallo en el primer rejón de muerte y certero en el segundo. Oreja para Paco Velásquez con el de su alternativa

Y la plaza se hizo silencio para ver a Diego Ventura que salió con la garrocha para recibir a porta gayola en la mismísima puerta de toriles. Toro bravo el segundo de Pereda que salió con muchos pies y al que paró con Generoso, colocando dos rejones de castigo al ocurrir la misma situación que en el primer toro. En banderillas, comenzó con Fabuloso realizando quiebros en la misma cara del toro. Con Velásquez puso una banderilla. Para banderillas cortas, y posterior rejón de muerte, sacó a Guadiana. Un rejón que no terminó de ser certero, aunque sí que acertó con el descabello. No salió muy contento el genio que prometió a la afición una segunda faena de mucha entrega ya que en la primera, un segundo de Pereda venido a menos, no permitió a Ventura expresar todo lo que llevaba dentro. Ovación

Palmas por Huelva para Andrés Romero ante el tercero de la tarde al que también recibiría a porta gayola montando a Golondrina. Colocó un solo rejón de castigo en lo alto y, aunque tomó un segundo, creyó que uno era suficiente. Sacó a Meridio para banderillas, arriesgando en unas embestidas en las que el astado arremetía con bravura. Prosiguió en banderillas con Guajiro, con quien buscó más la cara del animal en los cites. Para el último tercio eligió a Chamán, con quien clavó tres buenas banderillas cortos a un animal que colaboró con la actuación del rejoneador dejándose hacer. Clavó un rejón de muerte y, quieto en el sitio, el animal se llevó el aplauso de los tendidos y del mismo Andrés por su resistencia a caer. Romero tomó el descabello y no falló en su primer intento. Oreja con leve petición de segunda para Andrés

Cuarto de la tarde para Diego Ventura que recibía clavando un rejón de castigo a lomos de Guadalquivir. Después puso dos más, no quedando satisfecho con el segundo. Banderillas con Fino, citando de frente y con grandes ceñidos quiebros. Se gustaba Diego Ventura que terminó de levantar a los tendidos citando de lejos con Nazarí y toreando de lado, clavando al estribo y llevando cosido al astado en el mismo. Banderillas cortas al violín con Güero para terminar de formar el lío en el coso onubense. Previo al rejón de muerte, salieron al ruedo los forcados para su actuación. Pinchazo antes de clavar. Sacó el descabello, pero no hizo falta utilizarlo. El toro cayó en tablas. Dos orejas para Ventura que, aunque en los acero no terminó de brillar, corto las dos orejas

Turno para Andrés Romero con el quinto Pereda. Lo recibió con Copito, colocando también un rejón de castigo en el morrillo a la salida del animal por toriles. Segundo rejón de castigo para un toro noble, despistado en largas distancias. Fuente Rey para banderillas, con las que citaba de lejos y quebraba muy en corto, clavando dos a silla pasada y una al estribo. Continuó en banderillas con Farrugia, en esta ocasión, citando en corto. Fue ahí donde Romero puso patas arriba a los tendidos. Banderillas a silla pasada con quiebros espectaculares echándose encima al animal. De nuevo Chamán para las cortas y forcados a parar el toro antes de la suerte suprema. Todo se nubló en los aceros, con varios intentos antes de clavar un rejón de muerte. Vuelta al ruedo tras fuerte petición de oreja y bronca a la presidencia por negar la puerta grande al rejoneador onubense.

Último de la tarde para Paco Velásquez que brindó a Diego Ventura. Paró con Vascuño a un toro que salió despistado y sin ganas de entrar al juego, pero que se avispó con los dos rejones de castigo que puso el rejoneador. Volapié para banderillas, citando de lejos y clavando al estribo. Con Ritz acortó distancias, quebrando muy justo y clavando en alto las banderillas. Bandolero para el último tercio con quien clavó tres banderillas cortas. Encumbró su faena con un gran rejón de muerte que le sirvió para cortar su segunda oreja y acompañar a Ventura en la puerta grande

Pidió Andrés Romero un sobrero concedido por el director de lidia para devolver ese cariño a Huelva y mostrar la clase que atesora este rejoneador a su tierra. Paró muy bien al toro con Golondrina, llevándolo en la grupa para clavar un rejón de castigo. Arriesgó en banderillas metiéndose por dentro en tablas, citando de lejos y clavando grandes banderillas con quiebros en la cara del animal, lidiando muy de cerca. La plaza era un hervidero con un entregado Andrés Romero que continuó la locura con Farrugia, dejando una banderillas tras citar en corto andando hacia atrás. Una vez más, buscó el colofón a una gran faena con Chamán, con quien puso tres buenas banderillas cortas. No pudo ser a la primera, pero sí atinó a la segunda para pasaportar rápido al sobrero de regalo que el puntillero levantó hasta en dos ocasiones. Dos orejas con las que Andrés se quitó la espina.