Luque, una oreja en el cierre

Las Fallas de 2023 se cerraron con un mano a mano que anunciaba a dos toreros en muy buen momento y muy del gusto de los aficionados. Pero los aficionados no son suficientes para agotar las entradas de un festejo, y en Valencia, y en otros lares, ya no llena la plaza el santo patrón. Por eso, a la hora de confeccionar un cartel, se hace necesario estudiar qué ternas levantan mayor atractivo para el público, algo que dependerá de cada ciudad.

Cuando se trata de un mano a mano el esmero aún debe ser mayor. Los mano a mano han de programarse con dos matadores rivales de verdad, que los espectadores demanden ver con interés, que sean capaces de colgar el cartel de “no hay billetes”. Ureña y Luque concitaron alrededor de 5.000 personas, y eso, con independencia de la categoría de ambos matadores, no es bueno para ellos, ni para la feria, ni para la tauromaquia.

Para la ocasión Victorino lidió un encierro decepcionante del que sólo cabe rescatar al que saltó en cuarto lugar. Demasiado poco para lo que fue tan insigne hierro.

No anduvo sobrado de fuerzas el Victorino que abrió la tarde, y Paco Ureña encontró el mejor remedio para su debilidad: suavidad y temple. En su faena no hubo ni un solo tirón. Con la muleta ligeramente retrasada, lo citó cruzado para llevarlo cosido a las telas con mimo, siempre ceñido e intentando alargar su viaje. Pero a su entrega le faltó la emoción del toro.

El tercero de la tarde topaba más que embestía, y por mucho que el murciano intentó encelarlo en la franela, lograr el mínimo lucimiento fue pura quimera.

Ureña puso toda la carne en el asador ante el quinto. Se ajustó las embestidas con gran compromiso y tiró de él como si fuese bueno. Pero el toro no acababa de emplearse y se revolvía con presteza, y a punto estuvo de echárselo a los lomos en un par de ocasiones. No pareció importarle al de Lorca, que continuó exponiéndose con determinación, aunque sin la conexión necesaria.

Se quedó en las zapatillas de salida el segundo, y Daniel Luque le obligó a seguir su capote por abajo caminándole para atrás con seguridad. En el último tercio nunca acabó de ir metido en la muleta, echando una mirada al torero antes de cogerla y quedándose a medio viaje, impidiendo que el torero de Gerena pudiera confiarse.

Embistió a cámara lenta y con transmisión el cuarto en las primeras series que el sevillano planteó en redondo. Se le paró entonces el Victorino a la altura de la faja sin que el matador se inmutase. A continuación se echó la muleta a la mano izquierda para firmar la tanda más rotunda, y por ese pitón cerró su actuación antes de matar de certera estocada.

Para cerrar la feria saltó al albero “Verdadero”, que acudió por dos veces al caballo con alegría desde el centro del platillo. En el último tercio se quedo muy corto, arrollando sin humillar. Luque poco pudo hacer salvo justificarse.

Ficha del festejo:

19 de marzo de 2023, Valencia. 10ª y última de la feria de Fallas. Más de media plaza. Toros de Victorino Martín justos de presentación. 1º soso, 2º incierto, 3º descastado, 4º encastado, 5º deslucido, 6º deslucido.

Paco Ureña: saludos, silencio y saludos.

Daniel Luque: silencio, oreja y saludos.

Cuadrillas: Se desmonteraron tras banderillear al segundo Francisco Javier Amores y Jesús Arruga. Curro Javier lo hizo en el cuarto e Iván García en el sexto.

Fotos: Enfoque Taurino