Los mansurrones Valdefresno arruinan la Goyesca

Madrid, dos de mayo, día de la comunidad. Tendidos llenos, casi llena la plaza y una espectación que rozaba las de las grandes tardes de San Isidro. Y es que esto lo era, un cartel precioso, del mano a mano más castizo y madrileño que se puede ver. Un Uceda Leal y Fernando Robleño que sonaban a ecos de clásico y de torería. Ni la mismísima presidenta, Isabel Díaz Ayuso, se lo quiso perder, que entró con una ovación cerrada mientras saludaba desde el callejón a los tendidos, aunque la obtención le debió de aburrir ,y no es para menos, porque se fue antes del quinto toro.

Uceda Leal se enfrentaría al primero, tercero y quinto. Sólo le pudo sacar algo al primero, que aún así fue un manso declarado en el tercio de varas. Aún así en la muleta fue mejorando, pidiéndole sacar una grandísima tanda con la derecha que levantó los primeros olés de la tarde madrileña. Lo mismo con el tercer pase. Le probó por el pitón izquierdo por donde le sacó unos profundos naturales que volvieron a poner patas arriba la plaza. 

Volvió a repetir otra tanda más al natural, ya con el astado dando señales de muerte, en esta le volvió a sacar otra tanta bien ligadita y muy despacio. Decidió bien en ir a por la espada, pinchándole dos veces. Se le escapó la oreja asegurada con la espada. Ovación con saludos y pitada en el arrastre para este abre plaza.

Y hasta aquí la tarde de Uceda Leal porque lo que se encontró en el tercero u el quinto fueron dignos de levantarse del tendido e irse.

Primero se encontró con un toro sin embestida ni fuerza que acusó el fortísimo golpe que se dio de salida contra el burladero, astillándole de forma visible ambos pitones. Sin lugar a dudas debió ser devuelto a corrales por este percance pero aún así siguió en el ruedo, dónde con la muleta no dio ningún juego, sin embestida, fuerza, ni clase alguna. Silencio y fortísima pitada en el arrastre.

Con el quinto más de lo mismo o peor. Se encontró con un mansísimo toro de Valdefresno que desde el primer momento dió señales de corrales. En el momento de coger la muleta ni se arrancó el morlaco decidiendo coger la espada a los dos intentos, decisión que fue aplaudida en los tendidos. Le mató con una buena estocada de merito pegado a las tablas, aunque la emborronó la cuadrilla del diestro tras mil descabellos que dejaron una mala imagen. Silencio y pitada unánime para el astado.

La suerte de Fernando Robleño no iba a ser muy distinta, encontrándose con un falto de fuerzas de entrada, que fue devuelto a corrales con acierto. Ya con el sobrero de José Luis Pereda poco pudo hacer ante la nula clase del astado, que cada vez que podía giraba la cara para embestir al diestro. Se contaron más "uys" que "oles" por la cerca que le pasaba el toro y la fea manera de embestir. Silencio tras una estocada después de dos pinchazos. Pitos en el arrastre.

Con el cuarto se encontró con el mejor de la tarde. Un astado que, como sus hermanos,  parecía mansurrón de entrada pero que la gran labor del picador y los banderilleros, que se desmontaron tras unos magníficos pares, le consiguieron enderezar y conseguir que diera juego en la muleta. Y tanto que lo dio, el bueno de Robleño logró cuajar al toro por ambos pitones. Empezó con una serie al natural con gran profundidad, a la cual le siguió otra que metió en faena a toda la plaza. Ya con la derecha le dió un par de tandas rotundas para finalizar con una cumbre con la derecha que remató al natural. Con la plaza patas arriba y la locura hecha le dió una última con la derecha que sobró con el animal paradísimo.

Cogió la espada convencido, el eco de que una estocada le daba la puerta grande ya resonaban por los tendidos pero pinchó, pinchó hasta dos veces el diestro tan madrileño, fueron dos pinchadas de esas que te duelen más a ti que al toro. Ovación con saludos desde el callejón y palmas para el astado.

Cerró la tarde con el astado de más peso, 620 kg. Qué como no iba a ser de otra manera, salió rematadamente manso. Tal punto de mansedumbre era que cuando intentó lidiar con la muleta, el toro rehuía y rehuía de ella. Aún así el arte y la torería de Robleño le sacaron un par de pases solitarios celebrados con más resignación que entusiasmo por lo tendidos, ya que la tarde era definitivamente un petardazo de los de Valdefresno. Estocada y ovación para el diestro. Pitos en el arrastre para el cierra plaza.

Lo mejor de la tarde, la cuadrilla de Fernando Robleño, que salió a saludar las tres veces que pusieron banderillas. Lo peor, los Valdefresno, que pincharon la ilusión con la que se acogía la tarde.

Las Ventas (Madrid).- Tercer festejo de la Feria de la Comunidad, corrida Goyesca. Toros de Valdefresno para Uceda Leal y Fernando Robleño, mano a mano. Tres cuartos de aforo. El festejo da comienzo a las 18:30 horas retransmitido en directo por Telemadrid.

Ficha del festejo:

Uceda Leal, ovación con saludos, silencio y silencio

Fernando Robleño, silencio tras aviso, ovación con saludos y ovación 

Incidencias: Ovación de la plaza entera a la entrada de la Presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.

Fotos: Bartolomé Bernal

PROGRAMA MANO GOYESCA