SEVILLA

Castella y Roca Rey puntúan en un Resurrección gélido

Domingo de Resurrección en Sevilla. Cortaron una oreja por coleta. Morante, de vacío. Colgado el cartel de "No hay billetes"
domingo, 31 de marzo de 2024 · 14:13

Dos orejas fue el balance artístico de la tarde en el Domingo de Resurrección de la Real Maestranza. Sebastián Castella y Roca Rey tocaron pelo de distinta forma. El francés limó las asperezas de un segundo que radiografiaba antes de embestir y al que tragó mucho para imponerse y cortarle una oreja de estatus. Con el otro nada que hacer salvo mostrar ilusión ante uno deslucido. Por su parte Roca Rey tocó pelo tras una faena bonita y templada a uno enclasado al que exprimió al máximo. Al sexto no le pudo sacar nada por la falta de colaboración de uno desrazado. Abrió cartel Morante que dejó pinceladas de su gran toreo tanto en capote como con en muleta pero si poder construir faenas por culpas de dos “Esaboríos”. Se lidió una desigual corrida de Hermanos García Jiménez pero en conjunto bien presentada. Astados de dispar comportamiento en general.

1º.- “Esaborío”. Abrió plaza un bonito ‘Sardo Claro’, de la ganadería titular, algo montaíto arriba y astifino. El abreplaza salió abanto y tras fijarlo en el capote, Morante le soltó un par de lapas marca de la casa. Conjunción perfecta en dos verónicas a compás. Mientras el primero metía la cara abajo -más claro- pero por ambos pitones con escaso recorrido y limitado de fuerzas. La suerte de varas sin historia.

Durante la lidia y en el saludo “Esaborío” hizo extraños por el pitón izquierdo -embistió en rectitud- y a punto estuvo de arrollar. El bueno de Curro Javier lidió sensacional al toro y se llevó su primera ovación. Le abrió caminos al toro y le enseñó a embestir siguiendo los engaños. Excelentes pares de Curro Javier y Alberto Zayas que les obligaron a saludar montera en mano. Tras el oportuno permiso al palco, el genio de La Puebla del Río acarició en varias tantas la entregada embestida -mejor inicio que final- de su oponente. Hubo varios derechazos expresivos y templados pero a la obra le faltó continuidad y sobre todo transmisión por la falta de empuje del astado. A izquierdas esbozó algún natural sin demasiado ajuste ni convicción. 

2º.- “Raleo” le faltó cuajo al segundo de la tarde, un astado más despegado del suelo y con más brío que el anterior pero más desclasado que su hermano. Nada destacable en el recibo de capa. Lo mismo que con el piquero que hizo sonar el estribo protestando al sentir el palo en sus dos entradas reglamentarias. Se la jugaron Rafael Viotti y Luis Blázquez en sus pares y estuvo impecable José Chacón en la lidia.

Mucho mérito tuvo Sebastián Castella ante su inicial al que tragó mucho y consistió más. Un toro que no siempre iba metido en las telas y que en todo momento miraba una barbaridad. A pesar de ello, Castella lo trató consintiendo embestidas irregulares pero con el convencimiento de que lo metería en la canasta. Sebastián se puso en el sitio con una muleta sincera -paciencia- para hacer ver que él mandaba allí. Nunca le embistió dos veces igual, pero le construyó de forma intermitente una faena de extremado mérito por ambos pitones. Todo en línea ascendente por contenido y metraje en tandas con una y otra mano. Le dio fiesta, se la puso en el hocico y lo llevó metido -sacó fondo- hasta detrás de la cadera al natural y de derechas engarzó varios de gran expresión. Todo con naturalidad y temple. Firmó una actuación de figura con una gran estocada. Oreja importante.

3º.- “Amargado”. No hubo lucimiento en el recibo de capote con el tercero. Uno que embistió en rectitud en el percal y que tras entrar en el caballo fue devuelto por falta de fuerzas. 

3º Bis.- “Frangeado”. El sobrero, amplio de sienes, con volumen, un punto tocaíto arriba no dijo nada en todos los tercios. Un toro que iba y venía sin codicia y que recordó a los del ‘Raposo’ embestía por dentro en carrusel. Otro que se cuida en el peto para cumplimentar.

Roca Rey se apretó con su antagonista de inicio para hacer explotar una serie y meter a todos en la canasta. Andrés lo pasajeó enroscándoselo milimétricamente a derechas y dando así mayor longitud a su muletazo. Roca Rey tejió una labor estética y ligada ante uno enclasado y obediente que siguió los vuelos de la muleta con entrega. Lo mejor llegó a izquierdas con un par de series profundas y muy templadas -exigentes, al ralentí- donde se envolvió con su oponente. En el toreo fundamental hubo algún desacople en el cité pero tal vez fue para oxigenar al sobrero. Estocada y oreja ante uno dulce al que faltó más brío.

 

 

4º.- “Esaborío” (igual que el primero). A este Morante lo recibió con varias verónicas arrebatas y una media lagartijera que gustaron mucho. El cuarto un astado bajo sin estridencias. También protestó en el peto sin castigo alguno. La pareja formada por Joao Ferreira y Alberto Zayas protagonizaron un buen tercio que les obligó a saludar. Morante decidido comenzó su labor en los tendidos del 9 poniendo él mucho más que el toro. Quiso el de La Puebla componer ante uno dócil al que faltó raza. Lo intentó José Antonio con voluntad y determinación por ambos pitones pero aquello no decía nada por culpa una embestida anodina y vacía de transmisión. Labor sin pena ni gloria ante uno insulso. Silencio.

5º.- “Expléndido”. Un toro bien hecho al que Castella le construyó un saludo largo -intercalando verónicas y chicuelinas-  de buen gusto. El quinto sí peleó de bravo en el caballo y durante la lidia acometía con el cuello por delante. Virtud que acusó en los dos grandes pares de José Chacón. Saludó montera en mano.

Brindis al público. Buen inicio del francés ganando terreno y componiendo enfibrado. Lo sacó al tercio. A partir de ahí, el toro ha echado el freno y le costaba un mundo ir al trapo. Se movió el quinto pero muy deslucido en fondo y formas, sin colaborar al trasteo de Castella. Porfió con esmero pero su labor no tomó vuelvo nunca por la falta de oponente. Esfuerzo sin recompensa artística para Sebastián Castella ante uno deslucido.

6º.- “Deseado”, de Román Sorando -anunciado como segundo sobrero- se lidió para cerrar el festejo. Nadie anunció el motivo del cambio pero no era el reseñado en la tablilla de la autoridad. Un toro bajo bien hecho que manseó en los primeros tercios. Ante él Roca Rey tiró líneas con criterio y ayudando a su oponente por ambos pitones sin que aquello calentara por la falta de raza del cierraplaza. El hispano-peruano se afanó en sacar agua de un pozo vacío pero su esfuerzo fue en balde. Lo intentó buscando terrenos y alturas pero imposible ante tanta falta de todo. Firmó un espadazo.

 

Real Maestranza de Caballería de Sevilla (Sevilla).- Domingo de Resurrección. Toros de García Jiménez y Olga Jiménez para Morante de la Puebla, Sebastián Castella y Roca Rey. Lleno de "No hay billetes". Debido al mal estado del ruedo por la lluvia, arranca el paseíllo con cuarenta minutos de retraso.

Ficha del festejo:

Morante de la Puebla, silencio y silencio

Sebastián Castella, oreja y silencio

Roca Rey, oreja y silencio

Incidencias: Saludaron en banderillas Curro Javier y José Chacón.

Fotos: Arjona