FESTEJOS

Emilio Serna y Mario Palacios oreja por coleta en Teruel

El festejo fue suspendido por la lluvia tras la muerte del cuarto toro
sábado, 21 de septiembre de 2024 · 14:06

La tarde estuvo llena de emoción y entrega, con Emilio Serna destacando por su temple en el primero y Javier Antón dejando detalles aislados en el segundo. Mario Palacios arrancó una oreja tras una faena gustosa pese a una voltereta. A pesar de la torrencial lluvia, Serna volvió a brillar en el cuarto toro, mostrando gran valentía en un ruedo casi imposible por la lluvia.

Emilio Serna, torero venido de Perú para hacer temporada en España, recibió a su primer toro de la ganadería de Villamarta con una larga cambiada de rodillas, sorprendiendo a los tendidos . El inicio no pudo ser más espectacular, y tras ese saludo poderoso, continuó con una serie de verónicas llenas de empaque, templadas y con mucho sabor, haciendo gala de su buen oficio. Con los pies asentados, llevó al toro con suavidad y mando, mostrando desde el principio su dominio de la embestida.

Ya con la muleta, apoyado en las tablas, Serna logró ligar tandas de mucho calado, donde el temple y la profundidad de cada muletazo arrancaron los olés de la plaza. El torero mostró su madurez y entrega en cada pase, dominando la embestida con su quietud y sin perder la serenidad. El toro, que por momentos se enfurecía, encontró en Serna a un matador capaz de llevarlo con ritmo y control, demostrando que está dispuesto a dejar huella en la temporada española. Ovación.

El segundo toro de la tarde, destinado para Javier Antón, fue un ejemplar muy bien presentado de la ganadería de Villamarta, que desde su salida fue recibido con aplausos por el respetable. El toro lucía una imponente estampa, lo que generó gran expectación entre los asistentes. Antón, sin embargo, no logró asentarse del todo con el capote, recibiendo al astado con verónicas sueltas que, aunque mostraron algunos destellos de intención, no lograron hilvanar una faena sólida en los primeros compases.

Con la muleta, el diestro dejó algunos detalles interesantes que bien valen ser mencionados. Mostró cierta disposición en algunos momentos aislados, destacando algunos pases en los que intentó llevar al toro largo y templado, pero sin llegar a cuajar una faena redonda. A pesar de ello, Antón dejó entrever destellos de técnica y entrega, que, aunque insuficientes para levantar la faena por completo, mostraron su capacidad de intentarlo frente a un toro que exigía mando y firmeza. Silencio.

El tercer toro de la tarde, para Mario Palacios, corrió turno, por lo que salió a lidiar con su segundo del lote. Lo recibió con unas verónicas templadas y ajustadas que pronto arrancaron los "olés" del respetable, demostrando desde el inicio su intención de cuajar una gran faena. Toreando despacio y con mucho gusto, Palacios manejó con maestría la muleta, llevándose al toro por ambos pitones y consiguiendo que el público disfrutara de su toreo relajado y con profundidad.

Sin embargo, un susto casi ensombrece la faena cuando el toro le propinó una voltereta aparatosa, dejando un momento de tensión en la plaza. Lejos de amilanarse, el joven torero se levantó, se recompuso y, con valentía, regresó al ruedo dispuesto a darlo todo. La faena continuó con la misma entrega, y tras una gran estocada que colocó en lo alto, logró cortar una oreja, merecidamente concedida por su entrega y calidad frente al astado.

La tarde se complicó con una lluvia torrencial al salir el cuarto toro, transformando el ruedo en un barrizal casi imposible de torear. A pesar de las adversas condiciones, Emilio Serna mostró una gran disposición, decidido a seguir adelante en una auténtica lucha contra los elementos. Aunque la arena parecía un lodazal, el torero no retrocedió, y la plaza, ya empapada, observaba con atención el enorme reto que tenía por delante.

Serna recibió al toro con una larga cambiada de rodillas, un gesto de gran valor teniendo en cuenta el estado del ruedo. Con la muleta, intentó sacarle al astado los pocos muletazos que le permitían las circunstancias, dejando detalles de temple y pundonor. La plaza reconoció su valentía y la música sonó en su honor, subrayando el mérito de su entrega. Finalmente, con una gran estocada en todo lo alto, Serna cerró una actuación llena de coraje que, aunque limitada por el diluvio, fue aplaudida con fervor por el público. Oreja.

 

Teruel (Teruel).- Feria del Jamón. Corrida de Toros de Villamarta y Sobral para Emilio Serna, Javier Antón y Mario Palacios. Media entrada.

Ficha del festejo:

Emilio Serna, ovación y oreja

Javier Antón, silencio

Mario Palacios, oreja

 

Orden lidia Teruel

 

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