EL PUERTO

La realidad de Sara

La actriz canaria, azote de los toros, ha vuelto a la carga con las polémicas imágenes de la plaza de El Puerto de Santamaría en el festejo del pasado jueves
sábado, 8 de agosto de 2020 · 19:23

La actriz Sara Sálamo, apasionada defensora de las causas políticas y sociales a través de las redes sociales, se ha convertido en los últimos tiempos en el azote de la tauromaquia, enredándose en más de una ocasión con otros internautas con ideologías opuestas a las suyas. La última, a raíz de las imágenes del público en las gradas de la plaza de toros del Puerto de Santamaría el pasado jueves. Las fotografías aparentemente intentan mostrar cómo los asistentes al evento no respetaron la distancia de seguridad: "tengo un chiste sobre saltarse la distancia de seguridad en plena pandemia, mientras disfruto viendo cómo torturan otros seres y luego critico la manifestación del 8M. Ah, no, perdón... No era un chiste, que me he liado" manifestaba a través de su cuenta de Twitter.

A continuación retuiteó el hilo del periodista Iñaki López que comparaba dos fotografías, las gradas de un concierto de Loquillo del mes pasado y la mencionada corrida de toros en el Puerto "perdonad mi ignorancia sobre la tortura y el asesinato, pero ¿es posible que todos esos pañuelos blancos que lleva el público sean para taponar las heridas del toro e intentar salvar su vida mientras le increpan al asesino?"

 

Foto: Arjona

 

Un furibundo ataque más a la tauromaquia, pues una imagen, dependiendo de las perspectiva desde la que se tome, puede distorsionar la realidad, no en vano durante las primeras fases del desconfinamiento tras el estado de alarma provocado por la pandemia COVID-19, hemos visto algunos ejemplos de portadas de periódicos denunciando la falta de distanciamiento social en paseos y playas de nuestras ciudades, que observadas desde otro punto no eran tales. Lo mismo sucede con los "repletos" tendidos de la plaza de El Puerto el jueves, la misma imagen tomada por el objetivo de Arjona, distorsiona la visión de Sara y nos devuelve a la realidad de un espectáculo donde todos, empresa y aficionados, han cumplido con las normas sanitarias, tal y como pidió Garzón en la previa. Cosa que en otros lugares, como por ejemplo el Congreso de los Diputados y la bancada socialista jaleando a Pedro Sánchez, no sucede en ocasiones, pero en ese caso, mejor no morder la mano que te da de comer, ¿verdad Sara?

 

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