EN CORTO Y POR DERECHO

La temporada habla claro

Por José Carlos Arévalo
viernes, 25 de abril de 2025 · 07:14

El caso Fortes: Hace años, cuando un torero hacía algo excepcional, las empresas reaccionaban de inmediato, y al torero le llovían los contratos. Chicuelo, Granero, El Niño de la Palma, Félix Rodríguez, por ejemplo, se hicieron figuras cuando no llevaban toreadas ni seis novilladas. Hace menos años, por culpa del triunfo de César Rincón en la feria de San Isidro, se tuvieron que abrir los carteles cerrados de todas las ferias.

Eran otros tiempos. El año pasado, Jiménez Fortes dio una tarde clamorosa en la feria de Málaga y los empresarios se fumaron un puro. Sí, ya sé, los carteles estaban cerrados, pero este año, en las primeras ferias se ha quedado sentado en casita. Menos mal que Garzón lo puso en la Picassiana, el sábado de Gloria, y el malagueño toreó como los demás toreros sueñan torear, con un toreo al natural tan puro, tan irreal, tan torero que hasta Eolo, el dios antitaurino del viento, se tuvo que achantar. ¿Le servirá de algo? Lo dudo. Y la semana que viene diré por qué.

El caso Núñez (Álvaro): La corrida del sábado de Gloria en Málaga era el día D, la hora del desembarco. Un reto del sevillano Garzón a la plaza de Sevilla; una revancha para Juan Ortega, autor de la mejor faena en la Feria de Abril pasada, y de otras muchas más, e injustamente postergado el domingo de Resurrección en su propia ciudad; y un juicio sumarísimo más para Roca Rey, a quien se le juzga todas las tardes, con el público advertido por los doctos y finalmente entregado al torero. Pero los que se jugaban la tarde a cara o cruz, eran Jiménez Fortes, del que ya he escrito, y Álvaro Núñez Benjumea, gestor de la ganadería de su padre, Joaquín Núñez del Cuvillo, en sus años cumbre. En efecto, Álvaro fue a la ganadería paterna lo que Fernando Domecq a la de Jandilla. Pero el planeta de los toros es un mundo pragmático y solo cuenta lo que pasa hoy.

¿Qué se jugaba la nueva ganadería de Núñez Benjumea en Málaga? Nada más y nada menos que el pase a la primera fila ganadera, un sitio con una sola exigencia, que los toros embistan. No solo para verlos moverse vivaces fuera de las suertes, sino dentro, cuando la movilidad se transforma en embestida y el toro entrega toda su bravura hasta la extenuación. Y eso fue lo que hicieron los nuevos toros de Álvaro, un ganadero que volvió donde solía.

El caso Florito: Los jugadores de baloncesto son altos porque juegan con los brazos y la cesta está allí arriba. Los futbolistas son más bajos porque juegan con las piernas y la portería está justo en frente. Y los coches de carreras han evolucionado a un diseño más aerodinámico para penetrar mejor en el aire y correr más.

La morfología del toro también ha evolucionado a medida que se embravecía. Es menos alto que casi todos los bovinos sin joroba porque embiste por abajo, humillando. Antes, en el siglo XIX era más alto porque el toro, menos bravo, embestía por arriba, tenía media embestida y las suertes se remataban por las nubes. Ahora es más bajo de remos para afirmarse y no perder ritmo y aplomo; tiene más cuello para humillar más y acoplarse mejor al toreo ligado; se presenta más fino, menos ancho de pecho y la culata fuerte pero no desmesurada, por la ductilidad exigida por del toreo en redondo; ofrece una encornadura seria y más reunida para que quepa la muleta y el toreo sea más reunido, más auténtico; y se valora que tenga una viga plana porque facilita la postura de embestir, y no cuesta arriba, que es la de mirar, desparramar la vista y defenderse.

Todo esto es obra del ganadero, que al seleccionar machos y hembras en busca de mejores prestaciones demostró que estas van unidas, en general, a las armónicas hechuras del bovino bravo, como se suele ver en todas las plazas de primera… menos en la de Madrid. En Las Ventas abunda el toro por lo que parece (al mal aficionado) y no por lo que hace. Una cosa es el trapío y otra reventar la báscula. Por eso habría que preguntar a Florito, el veedor, que se supone sabe de toros, para quién reseña las corridas. ¿Para el que chilla, no sabe y manda, o para el que aguanta, calla y otorga? Ojalá tenga que tragarme estas palabras en el próximo San Isidro. Suerte, Florito.

El caso TV: Por fin una buena noticia: A Tele-Madrd, que transmitirá toda la Feria de San Isidro, se han sumado Castilla-La Mancha TV (11 festejos isidriles), Aragón TV (con 11corridas  2 novilladas) y La 7 de Murcia (con 11 corridas). A dichos canales también se suma, en la difusión total de la Feria, la página Web de Tele-Madrid, a la que se tiene acceso desde cualquier país. Enhorabuena a los responsables (Plaza 1 y Tele-Madrid). Es la primera gran respuesta, en el ámbito de la comunicación, a ese variopinto antitaurinismo que quiere, en el mejor de los casos, meter a la tauromaquia en un gueto.