Queridos Reyes Magos

Como ya sabéis, soy de dejar las cosas para el último momento, pero no iba a quedarme con las ganas de escribir mi carta y pediros varias cosas. En verdad, no sé si están muy a vuestro alcance, pero como es día de grandes sueños y la creatividad se dispara, he elaborado una lista de deseos que paso a comentaros.

En primer lugar, este año me gustaría pediros que TVE retransmitiera seis, diez, doce, veinte, cuarenta corridas de toros y novilladas durante esta temporada. Sé que es difícil, pero los juegos de muchos niños de mi generación se fomentaron en torno a estas tardes y hoy en día ninguno hemos salido balas perdidas.

También me gustaría pediros dos o tres niños por plazoleta y barrio, al menos, que tuvieran la santa bondad de jugar al toro, cuyas familias no tuvieran complejos en dejarlos jugar en libertad en esta sociedad que se las da de moderna.

Por supuesto, claro, quiero libertad, Reyes Magos; libertad para que la Policía no impida la celebración del encierro infantil de la Puerta del Sol; libertad para que YouTube no nos cierre los canales de vídeos a los taurinos; libertad para que no censuren fotografías de toreros en revistas y publicidad en las calles, ¿me oís?, libertad.

También os pido, cómo no, que el Programa Víctor Barrio venga este año por mi pueblo, que tengo ganas de que los niños de la zona se enfrenten a tan noble, sana y creativa actividad, para que sean ellos, el día de mañana, quienes digan si les gusta o no la tauromaquia una vez tenido el acercamiento.

Os pido que Toros para Todos siga quinientos programas más en antena; que Tendido Cero siga otros veinticinco años; que las revistas de toros hagan dos mil publicaciones más, por lo menos; que Barcelona vuelva a dar toros; que Mallorca se ordene y camine como España manda; os pido muchos alcaldes como el de Esparragosa de Lares para que los parques infantiles taurinos sean una realidad y no una utopía; etc.

En fin, queridos Reyes. Pido demasiado, ¿no? Pues aún tengo una cosita entre manos, que si me la concedéis os rindo máxima pleitesía de por vida: que en el escalafón taurino aparezcan dos o tres toreros con el aroma de Pepe Luis y la torería de Juan Mora, el empuje de El Cordobés y la novedad de Paco Ojeda, el arte de Curro y la enjundia de Paula.

Salgo para la calle a veros, amigos, en la esquina de siempre, con la familia, lleno de sueños, deseando que mañana, al menos, algo de lo pedido –¡un niño con un capote!- se me cruce por el camino cuando vaya a casa de mis abuelos. Que Dios reparta suerte.