GALLEANDO

Jiménez Fortes, la realidad de un torero

miércoles, 7 de junio de 2023 · 07:44

Hace tiempo que le aparecieron aquellos primeros síntomas de una tauromaquia distinta y sorprendente. De un enorme valor que algunos, “sabios” del toreo, lo disfrazaron de torpedad ante la cara del toro achacada a las persistentes cogidas que le provocaron graves cornadas e importantes lesiones. Simplemente absurdo. Tanto que igual acaba convirtiéndose en alguien importante en esto. Arrestos sigue demostrando, y quieto se queda. Es esta la realidad de un torero que cada vez que se enfunda el vestido de torear ofrece su toreo desde la perspectiva de la autenticidad rigurosa, inapelable y emotiva.

Lo cierto es que ha vuelto para mostrar la evidencia con un brillante toreo, cuidadosamente pulimentado, tras reencontrarse con el toro base de su triunfo el pasado sábado en la plaza de toros de Antequera. Merecido y justo logro conseguido desde la veracidad sin paliativos de apasionantes y, a veces, maestras faenas a cada uno de los seis toros estoqueados. No tan lejos quedan las tardes donde se le atisbaron posibilidades de éxitos cercanos. Donde su toreo sorpresivo sedujo e hizo disfrutar de su encanto. Donde las cornadas aminoraron los triunfos para hacerse dueñas de la situación. Después confusión, olvido, espera ilusionante para volver a ganar con el juego de la verdad.       

Su toreo puro, con predominio del temple, centrado en la ligazón e impulsado por el valor, sedujo y fascinó desde la apoteosis de la conquista al cuajar el toro de Julio de la Puerta, hasta la sensacional y complicada faena al encastado “victorino”. En cada una de la lidias se enseñoreó de pureza provocando el eco infinito de la emoción a una gente que lo ensalzó con apasionamiento cuando el toreo hizo su aparición. Sin duda, una interesante función con mucha sinceridad en su componente.

Ni que decir tiene, y es justo reconocer, que su concepto poco tiene que ver con la generalidad de lo cotidiano. Él ha vuelto para hablar en la plaza con el auténtico lenguaje del toreo. Su manifestación de arte sobrepasa códigos prefigurados. Toca gozar de este revelador torero en el que la valentía en sus intenciones artísticas es mérito añadido a su singular tauromaquia. Así que, a fuerza de ser objetivo, Saúl Jiménez Fortes es el torero.