Olivenza, capital del toreo

Olivenza parece medirse en el último lustro por los firmes pasos de una empresa que ha marcado el éxito de una feria venida a más cada año. Éxitos de gestión que han estado señalados por el buen hacer de una gerencia que ha sabido dar categoría a un ciclo convertido en referencia del inicio de la temporada taurina en España. Y caudal de ganancias no sólo para la localidad pacense, sino para las ciudades limítrofes.

Con laboriosidad e inteligencia, no exenta de ambición, siguen caminando en línea recta, sin vacilaciones ni zigzag, hacia el objetivo final: hacer de un fin de semana de marzo una gran feria taurina. La FIT, con José Cutiño al mando, ha sabido cambiar el guion establecido en muchas ferias añadiendo sentido común a una gestión con la que han conseguido dar prestigio al bello coso extremeño.

Una feria de arraigada tradición para una gente que acude en masa a la plaza con el deseo de ver y sentir el toreo de los más importantes diestros de los respectivos escalafones. De quienes son capaces de llenar los tendidos y gradas y hacer pasional y poderosa la lidia.

Decisiones objetivas y eficaces hechas según las exigencias que marca la realidad económica, social y taurina que vive España. Un ejercicio de responsabilidad y sabiduría empresarial para atraer, durante tres días, miles de personas que llegan a generar unos pocos millones de euros a la propia Olivenza y a la cercana Badajoz.

Así las cosas, la ciudad pacense volverá a marcar diferencias a partir del próximo viernes. Desde el día 1 de marzo hasta el día 3 se concentrará el toreo en cuatro acontecimientos aglutinados en tres días. Dos novilladas con los más granado e ilusionantes novilleros, y dos corridas de toros con las más importantes figuras del escalafón de matadores. Carlos Domínguez, Sergio Sánchez, “El Mella”, Manuel Román, Marco Pérez, Javier Zulueta y Tomás Bastos son las siete esperanzadoras promesas. Morante de la Puebla, Roca Rey, (dos tardes) Manzanares, Talavante, y Juan Ortega dan lustre a dos acontecimientos de lujo.    

Tan apasionante todo que, junto a los previsibles triunfos artísticos, éxitos económicos y las actividades paralelas, organizadas con el objetivo de atraer turismo y poner en valor la cultura y el patrimonio de la ciudad, Olivenza, un año más, se convertirá en la gran “capital del toreo”.