GALLEANDO

Sería de justicia

miércoles, 7 de febrero de 2024 · 08:16

Lo vi torear por primera vez una calurosa tarde de julio en “La Cobatilla” de José Murube. Allí, junto a su padre y maestro, esperaba impaciente su turno superando el miedo oculto tras el burladero y convencido de lo que quería y podía llegar a ser. Lucía cara de niño, hechuras de torero y se le atisbaban maneras para triunfar. Han pasado quince años. Desde entonces su vida ha sido una constante lucha por conseguir un objetivo que se le hace eterno. Graves cogidas, preocupantes lesiones óseas, y esa carrera de obstáculos en el discurrir del novillero casi imposibles de salvar.

El pasado jueves recogió el preciado trofeo, instituido por la prestigiosa tertulia taurina “Los 13”, que le proclama como novillero triunfador de la temporada de 2023 en la Maestranza. Un premio que, más que un reconocimiento, le acerca a su más anhelado deseo: hacerse matador de toros en la Sevilla de sus sueños.

Muy lejos queda aquel disfrute placentero bajo el sol de julio. El toreo bien hecho, y bien contado, en la soledad del campo bravo de quien me generó una enorme ilusión. Quizá, porque le creí capaz de dejar definido su futuro como torero en aquella plaza de tientas. ¡Ay, esa forma de torear!

Sin embargo, mi deseo se contradijo durante demasiado tiempo con la posición combativa de quien quiere y no puede. Quien le costó un mundo encontrar acomodo en época convulsa para las novilladas con picadores. Sólo pudo hacerlo, para avanzar, en difíciles apuestas en la Maestranza y Las Ventas arriesgando su presente y, sobre todo, su futuro. Y ahí ha estado, detenido en el tiempo, evocando el mañana.

El aroma clásico y natural de su toreo lo mostró con rotundidad el pasado mes de junio en la plaza de toros de Sevilla. El necesario triunfo para poder optar al doctorado, y alcanzar la meta, en esperado ejercicio de equidad de la empresa Pagés, con decisión real y eficaz, según las exigencias que marca la realidad del toreo. Sentido común y coherencia en los planteamientos, allí donde estarán los imprescindibles y los emergentes, para la gran Feria de Abril que se deslumbra. Todos parecen que se encontrarán. Todos interesan. Sólo queda esperar ver anunciado en los carteles a Curro Durán. Sería de justicia.