POR MONTERA

Un encierro monótono y unas retransmisiones sin interés

viernes, 21 de julio de 2023 · 18:34

El titular de esta semana viene a resaltar dos importantes aspectos del pasado San Fermín. Por un lado, la nefasta retransmisión de los encierros por parte de RTVE, y por otro la monotonía en la que han caído los encierros estos últimos años.

Empezaremos hablando de unas retransmisiones que un año más han dejado mucho que desear. Tan solo Teo Lázaro sabía un poquito de lo que hablaba, el resto del equipo periodístico que enviaron los de Torrespaña a Pamplona entendían de toros lo mismo que entiendo yo de Rugby (con todos mis respetos a este deporte).

No se puede retransmitir un evento que congrega a miles de personas, con un equipo que desconoce la tauromaquia, y en concreto desconoce a los toreros que se juegan la vida por la tarde con los astados que recorren el casco antiguo de Pamplona por la mañana.

El desconocimiento y la falta de motivación para informar a los espectadores sobre los resultados de los festejos que se celebraban no han sido los únicos que han llamado la atención. También las retransmisiones han sido muy deficitarias, enfocando únicamente a la cabeza de manada, sin dejar visualizar el resto de la manda (que en ocasiones patinaban y propiciaban caídas). Estos detalles brillaron por su ausencia en el directo de las cámaras de la televisión pública.

A todo esto, hay que sumar que los encierros pamplonicas ya no son lo que han sido toda la vida. Pues con unos bueyes que corren más que los toros, y que incapacitan la emoción de los protagonistas, es imposible ver emoción en unos encierros que son auténticas carreras de F1, para ver que ganadería es la más rápida.

Para nada estoy pidiendo que tenga que haber más cogidas, sino que a un servidor le gustaría ver mayor emoción en los encierros, con toros que se salen de la manda y que ponen en apuros a los corredores (algo que ya no existe).

Y no me extraña en absoluto esta falta de calidad, pues los días que pude estar este año en Pamplona, cuando andaba por la calle Estafeta tenía la sensación de que salía de una discoteca a las siete de la mañana, por la gran cantidad de antideslizante que hay en el recorrido, y que dejan un suelo muy áspero.

Entiendo que es una medida de seguridad, la cual apoyo con rotundidad. Pero quizás una poquita menos de cantidad, dotaría al encierro de una mayor emoción y al mismo tiempo ayudaría a la seguridad de los encierros.