POR MONTERA

Los piratas ya no llevan parche en el ojo

viernes, 3 de mayo de 2024 · 12:10

Comienzo esta columna con la plena consciencia de que algunos lectores podrían interpretarla como financiada por OneToro, pero nada más lejos de la realidad. Esta columna viene desde una reflexión que hice esta semana, les cuento.

Tras el revuelo generado por la censura del ministro de cultura hacia la tauromaquia (tema que abordaré en la próxima columna), me apetecía cambiar de tercio y hablarles de la sólida realidad del único canal televisivo dedicado a la tauromaquia al cien por cien: OneToro

Actualmente, se alza como el único bastión audiovisual de la tauromaquia, retransmitiendo las grandes ferias de toda la temporada. Cabe destacar la compleja infraestructura que sustenta este canal, compuesta por un amplio equipo humano y un equipamiento técnico de calidad. Todo ello, sumado a la adquisición de los derechos de imagen, eleva considerablemente los costes. No obstante, resulta crucial recordar que, por un precio anual de tan solo 150 euros, inferior al que podemos abonarnos en una sola feria, accedemos a más de 150 festejos retransmitidos en directo, además de programas especiales durante la semana.

Es fundamental que seamos conscientes de estos costes y valoremos el esfuerzo que implica mantener un canal de estas características. Creo que debemos apoyar a OneToro, pues su desaparición supondría una pérdida irreparable para la tauromaquia. Como bien dice el refrán: "No valoramos lo que tenemos hasta que lo perdemos".

En este sentido, también me gustaría resaltar la importancia de que OneToro valore la gestión de los derechos de sus resúmenes a las televisiones nacionales. Facilitar este contenido al mayor número de televisiones públicas posibles es crucial para ampliar la difusión de la tauromaquia y llegar a un público más amplio a través de los telediarios.

Es cierto que el pirateo sigue siendo una realidad en la actualidad. Sin embargo, debemos recordar que esta práctica no solo es ilegal, sino que también atenta contra la sostenibilidad del sector. Es necesario que todos los actores implicados en la tauromaquia, desde los aficionados hasta los profesionales, seamos conscientes de que la viabilidad de OneToro depende del apoyo económico de su audiencia.

En definitiva, es hora de que todos seamos partícipes del futuro de la televisión taurina, apoyando al canal y valorando el esfuerzo que realiza para llevar los toros a nuestras pantallas. Ojalá, todos seamos capaces de remar en la misma dirección por el bien del toreo y disfrutemos con orgullo de un canal taurino de calidad a un precio asequible.